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Al menos 17 muertos en un atentado suicida contra un mercado en Nigeria
Al menos 17 personas murieron hoy en la ciudad nigeriana de Maiduguri, en el norte del país, en un atentado con un vehículo bomba contra un mercado de la localidad.
“Mis hombres han contado minutos después del incidente 17 cadáveres”, dijo el comisario local de Policía Lawan Tanko al diario nigeriano Daily Trust.
Por su parte, fuentes médicas hablan de al menos 30 muertos en el ataque contra el mercado, que destruyó una veintena de vehículos.
Según la fuente, los cadáveres habrían sido trasladados a un hospital cercano.
Las primeras informaciones hablan de un terrorista suicida, que habría hecho estallar la bomba desde el vehículo de tres ruedas que conducía.
Un policía de tráfico, varios vendedores callejeros y miembros de sus familias y conductores que pasaban por la zona están entre los fallecidos.
La explosión provocó el caos en la calle, donde chocaron varios vehículos mientras soldados habrían fuego y los supervivientes huían a la carrera.
El ataque se produjo frente a una instalación militar y cerca de una cadena local de televisión, según medios locales.
El atentado no ha sido reivindicado hasta el momento, pero la prensa nigeriana apunta al grupo radical islamista Boko Haram como autor del ataque.
Maiduguri es la capital del norteño estado de Borno, considerado su base espiritual por la milicia fundamentalista, que ha cometido numerosos y sangrientos ataques contra civiles en la zona.
Desde el pasado 16 de mayo, las autoridades de Nigeria realizan una ofensiva antiterrorista en los estados de Yobe, Borno y Adamawa, en el noreste del país, todos ellos sometidos al estado de emergencia.
La operación se inició tras un incremento de la actividad de Boko Haram en esa zona, aunque se siguen produciendo ataques de los integristas.
El grupo, cuyo nombre significa en lengua local “la educación no islámica es pecado”, lucha por imponer la Ley Islámica en el país africano, de mayoría de población musulmana en el norte y predominantemente cristiana en el sur.
Desde 2009, cuando la Policía acabó con el líder de Boko Haram, Mohamed Yusuf, los radicales mantienen una sangrienta campaña que ha causado más de 3.000 muertos, según cifras del Ejército nigeriano.
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