Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
Noticia de agencia

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.

La ofensiva final de Clinton busca la reconquista del Congreso de EE.UU.

La ofensiva final de Clinton busca la reconquista del Congreso de EE.UU.

EFE

Washington —

0

A tan sólo tres semanas para las elecciones en Estados Unidos, la campaña de la candidata demócrata, Hillary Clinton, ha decidido dar un giro ofensivo a su estrategia en esta recta final, centrando sus objetivos en aquellos estados clave donde también está en juego el poderoso control del Congreso.

La campaña de la exsecretaria de Estado anunció este lunes una serie de actos en distintos estados donde hasta ahora no había dedicado muchos recursos al ser eminentemente conservadores.

Sin embargo, los buenos pronósticos de sus resultados en los estados más reñidos y la importancia de recuperar el control de al menos la Cámara Alta, ahora en manos republicanas, como la Cámara de Representantes, han obligado a su equipo a afinar su estrategia.

Su director de campaña, Robby Mook, explicó que la aspirante demócrata “aumentará drásticamente” sus esfuerzos en Arizona, un estado eminentemente republicano, pero donde un importante asiento del Senado está en juego.

El senador republicano John McCain está peleando por mantener su silla en la Cámara Alta, una empresa que hasta ahora no le ha resultado complicada -lleva en el cargo desde 1987-, pero que con la irrupción del polémico magnate Donald Trump como candidato presidencial de su partido puede ver peligrar.

La alta población latina que registra Arizona, y los ataques indiscriminados del magnate hacia los hispanos, han hecho que hasta el propio McCain ponga en duda sus aspiraciones frente a la candidata demócrata, la legisladora Ann Kirkpatrick.

Clinton invertirá así más de dos millones de dólares en Arizona y desplegará a su batería de pesos pesados, empezando por la primera dama, Michelle Obama, quien acudirá a Phoenix para apoyar la candidatura demócrata.

En Indiana y Misuri, Mook indicó que la campaña invertirá otro millón de dólares para impulsar la participación electoral, a pesar de ser conscientes de que son territorios favorables para el multimillonario en la carrera presidencial.

Allí, sin embargo, es muy importante lo que ocurra en las peleas para el Senado, donde los republicanos defienden sus asientos y las opciones demócratas de arrebatárselos parecen cada vez más altas.

Nevada, uno de los estados más disputados entre Trump y Clinton, es también uno de los lugares fundamentales para que los demócratas puedan recuperar la mayoría del Senado que perdieron en 2014, y es que allí, a diferencia de la mayoría de las carreras senatoriales, son los demócratas quienes defienden su asiento.

El escaño ocupado por décadas por el actual líder de la minoría demócrata, Harry Reid, queda vacante después de que este anunciara su retirada al fin de este ciclo electoral, por lo que la ex fiscal general de estado Catherine Cortez-Masto deberá conservar el asiento para su partido frente al republicano Joe Heck.

Una muestra de la importancia de esa pelea es que el vicepresidente Joe Biden y la propia Hillary Clinton acudieron a Nevada ya la semana pasada para apoyar a Cortez-Masto, y esta semana harán lo propio el senador Bernie Sanders y el presidente Barack Obama.

En Pensilvania, uno de los estados donde ambas campañas han invertido más esfuerzos para llegar a la Casa Blanca, la carrera por el asiento del Senado también está muy reñida, y la republicana Pat Toomey deberá pelear por quedarse en la Cámara Alta frente a Katie McGinty.

Además de las presidenciales, el país votará el 8 de noviembre por renovar un tercio del Senado y la totalidad de la Cámara de Representantes, por lo que Clinton también está poniendo dinero en dos distritos de la Cámara Baja en los estados de Nebraska y Maine, donde los demócratas tienen más opciones.

Aunque algunos optimistas creen que el efecto negativo de Trump en los comicios legislativos podría también permitir a los demócratas retomar el control de la Cámara de Representantes, lo cierto es que necesitarían una victoria abrumadora para recuperar los 59 escaños de diferencia que los separan.

No obstante, Clinton pretende como mínimo reducir esa brecha en la Cámara Baja y que los demócratas se hagan con el control del Senado ya que, de lo contrario, su capacidad para gobernar la Casa Blanca con un Congreso totalmente opositor se vería en apuros.

Etiquetas
stats