Los países de la UE respaldan un nuevo enfoque para el desarrollo hasta 2030

Los ministros de Desarrollo de la Unión Europea (UE) aprobaron hoy una nueva estrategia de cara a contribuir a las metas de la ONU para 2030 en esta materia, que busca superar la política de donante-receptor para avanzar hacia colaboraciones concretas en áreas en las que los países tengan más necesidades.

“Es una nueva manera de mirar al desarrollo que se ajusta a los acontecimientos en la agenda internacional en los últimos años”, indicó a la prensa la alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini, con ocasión del Consejo de ministros comunitarios.

Explicó que se trata de avanzar de “un enfoque tradicional de receptor de donantes a uno de asociación en el que trabajamos con nuestros socios en diferentes ámbitos”.

El objetivo será principalmente erradicar o reducir la pobreza, pero también abarcar otras áreas “que afectan directamente a las condiciones de vida de la gente sobre el terreno”, señaló.

Mogherini reconoció que, en el terreno del desarrollo, “nuestro principal y privilegiado socio sigue siendo África”.

Este nuevo “consenso” sobre desarrollo es la respuesta de la UE a la agenda para desarrollo sostenible para 2030 e incluye los principios que guiarán la cooperación con los países en desarrollo durante los próximos quince años, así como una estrategia para alcanzar las metas de desarrollo sostenible, según los ministros.

La iniciativa, propuesta por el Consejo y el Parlamento y la Comisión Europeos, se espera que reciba el respaldo del pleno de la Eurocámara el próximo 31 de mayo.

Esta estrategia pretende responder a retos demográficos, económicos, sociales o medioambientales, y ayudar a la resilencia de los países, sociedades e individuos.

Fija la atención, además, en la igualdad de género, la juventud, las inversiones y el comercio, la energía sostenible y la acción por el clima, la buena gestión, la democracia, el Estado de derecho y los derechos humanos y la migración y la movilidad.

La UE destaca en este documento que una migración y movilidad “bien gestionadas” pueden hacer “contribuciones positivas para un crecimiento inclusivo y desarrollo sostenible”.

Alerta a su vez de que la inmigración irregular puede dar lugar a “enormes desafíos e impactar negativamente en los países de origen, tránsito y destino”.

“La migración se ha convertido en un asunto cada vez de más presión tanto para los países en desarrollo como desarrollados”, subraya.

Hungría, con una política migratoria restrictiva, expresó reticencias al lenguaje con el que se estaba redactando el texto aunque finalmente recibió luz verde por unanimidad, dijeron fuentes comunitarias.

Una de las principales aportaciones de este documento es que pide “mayor coordinación y coherencia” entre la Unión y sus Estados miembros par lograr resultados “más eficaces” y “más impacto”.

Además, propone un enfoque “a medida” y “diferenciado” para los diferentes socios a la hora de promover programas conjuntos, y destaca la necesidad de transparencia, responsabilidad mutua y la participación plena de la sociedad civil.

La UE es el principal donante global de ayuda humanitaria al proporcionar más de la mitad de la asistencia en todo el mundo.

Está previsto que la estrategia sea firmada oficialmente el próximo 7 de junio, con ocasión de los Días Europeos del Desarrollo, que se celebran cada año en Bruselas.