El presidente costarricense urge al Congreso a aprobar leyes para paliar el déficit

El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, urgió hoy al Congreso a aprobar leyes para paliar el déficit fiscal, al exponer un informe anual de su segundo año en el poder.

El mandatario, quien el 8 de mayo cumplirá su segundo año de Gobierno, la mitad del mandato, destacó que la economía creció en 2015 a un ritmo del 3,7 %, no se registró inflación y los tipos de interés y el tipo de cambio del dólar se mantuvieron estables.

“Las medidas adoptadas, junto con una coyuntura internacional favorable, explican los alentadores niveles de crecimiento de nuestra economía, la estabilidad y transparencia del tipo de cambio, la contención del alza de las tasas de interés y el decrecimiento a cero de la inflación, algo que no se registraba desde 1977”, declaró Solís.

Según el presidente, el desempeño del país en el ámbito económico “es fundamentalmente exitoso gracias a la seriedad y dirección del manejo macroeconómico”.

Solís dijo que desde hace siete meses los indicadores muestran “una continua aceleración económica”, con una proyección de crecimiento para el 2016 del 4,2 %.

“Este resultado es aún más meritorio pues las proyecciones del comportamiento del déficit fiscal para el 2015 eran que este sería superior al 6 %. Los esfuerzos de contención del gasto, mejora en la recaudación y eficiencia de procesos permitieron que se mantuviera por debajo de esa cifra”, aseguró el gobernante.

El año pasado el déficit fiscal cerró en un 5,9 % del producto interior bruto (PIB).

Solís urgió a los diputados a aprobar un paquete de leyes fiscales que pretenden incrementar los ingresos y racionalizar el gasto como medida para paliar el déficit que, advirtió, alcanzará el 8 % en 2016 de no aplicarse reformas.

Estas iniciativas de ley están relacionadas con la eficiencia en la administración de los recursos públicos, modificaciones al impuesto sobre la renta, la creación del impuesto sobre el valor agregado, del impuesto a las personas jurídicas, cambios a la ley de regímenes de exenciones fiscales y lucha contra el fraude fiscal.

Además, una reforma a la normativa de los regímenes especiales de pensiones con cargo al presupuesto nacional y la ley sobre la promoción del buen desempeño de los servidores públicos.

“Son propuestas equilibradas de ingresos y gastos capaces de bajar el déficit fiscal en un 3,75 %, una cifra suficiente para reducir de manera significativa el riesgo actual”, manifestó Solís.

El mandatario alertó de que si no hay avance en esta materia, el Gobierno que lo sustituya en 2018 “se verá enfrentado con una situación verdaderamente agobiante que podría dar al traste con las excelentes perspectivas económicas que Costa Rica tiene”.

En materia de educación, Solís destacó como principal logro alcanzar casi el 8 % del PIB en inversión, como una muestra de que su Gobierno es “un defensor radical del financiamiento de la educación pública”.

En materia laboral, el mandatario reconoció que el descenso en el desempleo es “demasiado pequeño como para que rompa con la tendencia histórica, que oscila entre el 8 % y el 10 %”.

La pobreza se mantuvo en el 21 % en 2015, pero Solís aseguró que los programas estatales nuevos están “propiciando un cambio que sentará las bases para la erradicación de la pobreza y la disminución de la desigualdad”.