Tras las regionales francesas se abre la batalla por las presidenciales de 2017

El análisis hoy por los partidos de los resultados de la segunda vuelta de las elecciones regionales en Francia, en las que el ultraderechista Frente Nacional (FN) no consiguió ningún triunfo ante el aumento de la participación, abre la batalla por las presidenciales de 2017.

El presidente francés, François Hollande, almuerza con su primer ministro, una entrevista dedicada al examen de esos resultados, y en particular a la forma de responder a la petición de la dirección de su partido, el Socialista (PS), para que el Gobierno dé un giro social.

El primer secretario del PS, Jean-Christophe Cambadelis, dijo anoche en referencia al Ejecutivo que “no podemos continuar así. Hay que actuar contra la precariedad y por la actividad”, una “inflexión que tiene que producirse durante los próximos 18 meses”, antes de las presidenciales.

El portavoz gubernamental, Stéphane Le Foll, excluyó hoy en la emisora “France Inter” cualquier movimiento brusco en la línea política e insistió en que “Francia necesita diálogo social para encontrar los buenos compromisos”.

“Todos los que nos llevan a la radicalidad (...) nos llevan contra un muro”, añadió Le Foll, que descartó hacer caso a quienes en la izquierda dicen que hay que aumentar el gasto público y puso el acento en que “es un error” que el alza del FN se deba a la pobreza, puesto que esa formación es fuerte en regiones que no son pobres.

El canal “BFM TV” señaló que Hollande y Valls preparan una remodelación “mínima” del gabinete a partir de mediados de enero, que irá acompañada por “un pacto de urgencia” que contenga medidas sociales.

De momento, el que no va a cambiar es el ministro de Defensa, Jean-Yves Le Drian, pese a haber ganado en Bretaña y convertirse en el próximo presidente de la región.

Le Drian insistió hoy en que había anunciado a los electores que iba a compatibilizar esos dos cargos mientras lo estime adecuado Hollande.

Por lo que respecta a la oposición conservadora, Los Republicanos tienen convocada una reunión del buró político a las 10.00 GMT donde se espera un debate sobre la posición de su presidente, Nicolas Sarkozy, que en particular dos pretendientes a las primarias de la formación, Alain Juppé y François Fillon, consideran muy derechista.

Otro de los puntos que se contemplan es un posible adelantamiento del calendario de esas primarias para designar a su candidato a las presidenciales, inicialmente programadas para noviembre.

Los Republicanos lograron anoche ganar en siete de las regiones metropolitanas, mientras que el PS se mantendrá en cinco y en Córcega gobernarán los nacionalistas.

El FN, que en la primera vuelta del 6 de diciembre tuvo un resultado histórico con más del 27 % de los votos en el conjunto de Francia y terminó en primera posición en seis regiones, quedó defraudado en sus expectativas de llegar al poder en alguna.

Una de las principales claves fue el aumento de la participación entre la primera y la segunda vueltas: del 51,08 % al 58,53 %.

Como señaló hoy el director del instituto demoscópico Ipsos, Brice Tenturier, hubo una movilización de muchos electores que se decidieron a acudir a las urnas para evitar una victoria de esa agrupación.

El vicepresidente del FN, Florian Philippot, que era candidato a conquistar la región de Alsacia, Champaña, Ardenas, Lorena, hizo hincapié en que su partido, batió ayer su récord histórico en porcentaje y en número absoluto de votos, y afirmó que su líder, Marine Le Pen, puede ganar las presidenciales de 2017.