Los talibanes niegan su implicación en el ataque a la Cruz Roja en Afganistán

Los talibanes afganos negaron hoy a través de un comunicado su implicación en el ataque suicida del pasado miércoles contra las oficinas del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en la ciudad de Jalalabad, en el este de Afganistán.

“El Emirato Islámico quiere dejar claro que ni está implicado en el ataque a la oficina del CICR en Jalalabad, ni apoya ese tipo de ataques”, afirmó en la nota el portavoz talibán Muhamad Yousaf Ahmadi, según recoge la agencia local de noticias AIP.

El portavoz talibán aseguró que entre sus objetivos militares no se encuentran “los civiles que sirven al pueblo” y que, por el contrario, lo que hacen es “protegerlos por el bien de la nación”.

La reacción del CICR a la acción terrorista en la que falleció un guardia de seguridad y resultó herido un trabajador extranjero no se hizo esperar y hoy un portavoz de la organización en Afganistán, Abdul Hasib Rahimi, anunció el cierre de la oficina en Jalalabad.

Además, Rahimi aseguró ante la prensa que la Cruz Roja lleva desde ayer sin realizar ningún tipo de operaciones en Afganistán y que se ha instado a todo el personal a restringir sus movimientos dentro del territorio afgano.

La operación en Afganistán de la Cruz Roja es la de mayor envergadura que efectúa en el mundo, con 1.800 colaboradores desplegados en más de 17 localidades de todo el país.

Casi doce años después de la invasión estadounidense que propició la caída del régimen integrista talibán y en pleno proceso de repliegue de las tropas extranjeras, la guerra afgana se halla en uno de los momentos más sangrientos.