Catalá cree que la renuncia al escaño es una “decisión personal” de Barberá

El ministro de Justicia y de Fomento en funciones, Rafael Catalá, ha afirmado hoy que la renuncia de la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá a su escaño en el Senado tras ser imputada por supuesto blanqueo de dinero es “una decisión personal” que “sólo a ella le puede corresponder”.

Catalá, que ha asistido en Málaga a la firma de un convenio para un proyecto de Formación Profesional Dual, ha señalado a preguntas de los periodistas que Barberá “ha hecho un ejercicio de responsabilidad pidiendo su baja como militante del PP y, por tanto, alejándose políticamente del partido”.

Ha añadido que su condición de senadora “la ostenta como consecuencia de la decisión del Parlamento de la comunidad autónoma, que la designó como tal” y que el escaño “es de los diputados y los senadores”, por lo que la renuncia “es una decisión que sólo a ella le puede corresponder”.

También ha recordado que, como ministro de Justicia, ha “reiterado permanentemente” que “en una democracia que defiende los derechos de los ciudadanos, la presunción de inocencia es un valor y un pilar del Estado de Derecho”.

“No debemos permitir que se voltee el principio y acabemos trabajando sobre la presunción de culpabilidad. Hablo de Rita Barberá o de cualquier persona, pertenezca al partido que pertenezca o tenga la ideología que tenga”, ha subrayado.

El ministro ha agregado que Barberá “está inmersa en un proceso judicial en el que el Tribunal Supremo ha designado un instructor para que inicie las investigaciones”.

“No creo que haga falta recordar procesos equivalentes en el Tribunal Supremo que afectaban a personas conocidas especialmente en esta comunidad autónoma (Andalucía) y en qué momento se produjeron dimisiones y la exigencia de responsabilidades políticas por los partidos”, ha dicho Catalá.

El ministro cree que “hasta que no se produzcan esos hitos procesales no es bueno anticipar presunciones de culpabilidad ni la actuación de la Justicia” y ha pedido “dejar trabajar a los tribunales”.

“Cuando concluya el instructor su investigación y proceda en su caso la solicitación de actuaciones procesales se podrá exigir responsabilidades en ese momento”, ha insistido.

Ha recordado que en el programa electoral del PP y en el acuerdo con Ciudadanos “es la imputación formal o la condición de encausado, según la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal, cuando es razonable exigir responsabilidades políticas, no antes, porque se pueden cometer errores muy graves sobre la reputación de las personas”.

Al preguntársele cómo puede afectar al PP el caso de Barberá en el momento actual, el ministro ha subrayado que el Gobierno de Rajoy “ha hecho un paquete de reformas por la regeneración democrática, la transparencia y la lucha contra la corrupción como nunca se había hecho en España”.

Ha citado la Ley de Financiación de Partidos Políticos, la reforma del Código Penal para “que los corruptos devuelvan hasta el último euro robado”, la Ley de Transparencia o el Estatuto del Alto Cargo, que permiten “mirar al futuro con la confianza de que las instituciones tendrán controles para que nunca más en el futuro se produzcan las prácticas de corrupción que se han conocido”.

Por ello, Catalá cree que el PP tiene “legitimidad para ir con la cara muy alta explicando lo que ha hecho por una democracia más fuerte y más transparente” y también porque cuando se han “acreditado mínimamente” responsabilidades ha sido “implacable” y sus responsables “han sido expulsados del partido y han dimitido de sus cargos públicos”, por lo que ha hecho “lo que tenía que hacer”.