Fin de semana revuelto, antesala de una semana estable y cálida

La cola de un frente frío asociado a una borrasca atlántica recorrerá este fin de semana el norte de la Península de oeste a este con lluvias y caída de temperaturas, que volverán a recuperarse el lunes con la vuelta de la estabilidad.

No obstante, mañana, sábado, se registrarán todavía valores “por encima de lo normal” en puntos del litoral mediterráneo y Andalucía, donde las máximas oscilarán entre los 24 y los 29 grados, ha indicado la portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) Ana Casals.

Tampoco las mínimas bajarán de los 4 grados centígrados en ninguna provincia, se quedarán por encima de los 20 en puntos de Canarias y rozarán los 17 grados en el interior de Andalucía y litoral mediterráneo.

Ayer las máximas se situaron por debajo de lo normal en todas las regiones, salvo en el norte, a partir de hoy “suben muchísimo” y mañana, con el paso del frente, tenderán a bajar en muchas zonas, ha señalado la portavoz.

“Si trazamos una línea ente la frontera de Huelva con Portugal y el País Vasco, todo lo que queda en la izquierda, sobre todo Castilla y León, registrará este sábado un descenso acusado de las mínimas”, mientras que las máximas se quedarán en 18-20 grados en Castilla y León, Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco y Navarra.

El domingo seguirán bajando las mínimas en todas las regiones, salvo en el cuadrante sureste, y las máximas los harán en Navarra, extremo este de Andalucía y Baleares.

Aunque lo más significativo será la escalada general de los termómetros a lo largo de toda la semana próxima, en que se registrarán de nuevo valores por encima de los 30 grados centígrados en puntos de Andalucía; “vamos camino de un año de récord de temperaturas”, ha indicado Casals.

“La situación de las últimas semanas se debe a la presencia de un anticiclón muy potente y a que la circulación general de los frentes se sitúa en niveles muy altos, lo que no permite que ni siquiera lleguen a Galicia”, ha explicado.

Sólo el paso de la tormenta Ophelia “nos dejó una depresión en altura o borrasca que nos ha afectado y ha favorecido las lluvias durante unos días”.

De hecho, entre el 11 y el 17 de octubre las precipitaciones afectaron a la mayor parte de España, con la excepción del Levante peninsular, Cataluña y ambos archipiélagos, con acumulaciones superiores a 30 litros por metro cuadrado en puntos de A Coruña y Pontevedra, zonas del Sistema Central, norte de Tarragona y oeste de Andalucía, hasta 60 litros al sur de Córdoba.

Sin embargo, según la Aemet, el valor medio nacional de las precipitaciones entre el 1 y el 17 de octubre fue de 8 litros por metro cuadrado, casi un 80 % menos que el valor normal (39 litros por metro cuadrado), y las cantidades recogidas fueron un 25 % menores en casi toda la Península y ambos archipiélagos.

La entrada de este nuevo frente a partir de mañana dejará lluvias más frecuentes e intensas en Galicia, Cantábrico oriental y noreste de Cataluña, aunque afectarán también de manera más débil a puntos de los sistemas Central e Ibérico, norte de Canarias y Baleares.

También el viento será protagonista, con rachas fuertes en el litoral norte peninsular, bajo Ebro y Baleares, así como el estado de la mar, con olas de 5 a 6 metros en los litorales de Galicia y Cantábrico y de 4 a 5 metros en el País Vasco, que han obligado a activar para el sábado el nivel de aviso naranja en estas zonas.

La portavoz de la Aemet ha adelantado que a partir del viernes próximo “existe una pequeña probabilidad de que un nuevo frente atlántico se cuele por el noroeste peninsular”, lo que daría lugar a precipitaciones en Galicia y zonas próximas, así como en las islas Canarias más occidentales.

Esta situación traería también un notable descenso de las temperaturas en Galicia, Cantábrico y alto Ebro e intervalos de viento fuerte en el litoral norte peninsular.