El Gobierno argentino visita las zonas inundadas y la población se moviliza para ayudar

Altos cargos del Gobierno argentino recorrieron hoy las zonas inundadas, mientras centenares de personas se movilizan para enviar ayuda al noreste del país, donde dos personas han muerto y 20.000 permanecen evacuadas por la crecida de los ríos Uruguay, Paraná y Paraguay.

“Esta creciente apunta a ser una de las más complicadas de la historia”, declaró a radio Mitre el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, tras visitar el sur de la provincia de Entre Ríos, una de las más afectadas.

Un cuarto de la ciudad entrerriana de Concordia está bajo el agua por el desborde del río Uruguay, lo que ha obligado a 10.000 personas a abandonar sus hogares.

El concejal de Desarrollo Humano de Concordia, Guillermo Echenause, informó a medios locales que se mantiene el “estado de emergencia” pese al cese de las precipitaciones, que ha propiciado un leve retroceso de las aguas.

Las autoridades sanitarias están también en alerta ante el riesgo de epidemias.

Organizaciones como Cruz Roja, Cáritas, Red Solidaria y Fundación Sí, entre muchas otras, llaman a donar alimentos no perecederos, pañales, elementos de higiene, de limpieza y botas de agua, que son repartidas por voluntarios.

Los puntos de donación pueden consultarse en el mapa interactivo Acásedona, que debutó con las inundaciones que afectaron a la provincia de Buenos Aires el pasado octubre.

La mejoría meteorológica ha frenado también el avance de las aguas en las otras provincias afectadas, como Chaco, Santa Fe, Misiones y Corrientes.

En esta última, que hoy sobrevuela el jefe de Gabinete, Marcos Peña, junto al gobernador provincial, Ricardo Colombi, los evacuados y autoevacuados ascienden a 8.000.

“Tenemos dos problemas: uno es la creciente de los ríos Paraná y Uruguay, y otro es el problema de los 12 ríos internos de la provincia que también han crecido e impide que el desagüe sea normal”, dijo Colombi en declaraciones radiales.

Pese a la emergencia que vive la provincia, el gobernador aclaró que “el problema mayor es el día después de que bajen las aguas porque la gente tiene que volver a sus casas, hay que recuperar los caminos, los sistemas energéticos y la producción”.

El director de la Fundación Sí, Manuel Delgado, coincidió en que el desafío “más complejo” llegará cuando los evacuados puedan regresar y tengan por delante el trabajo de reconstruir sus hogares.

Frigerio avanzó que el Gobierno encabezado por Mauricio Macri destinará importantes recursos para la reconstrucción y prometió que realizarán “obras por el manejo del agua” para minimizar futuras inundaciones.

Además de Entre Ríos y Santa Fe, más de 7.000 evacuados se reparten entre las provincias de Chaco y Misiones.