Méndez (UGT) teme que las críticas a la independencia tengan efecto rebote en los votantes

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha considerado hoy que la sobreutilización de declaraciones de líderes internacionales y de entidades financieras en contra de la independencia de Cataluña pueden provocar un “efecto rebote”, porque pueden ser mal entendidas por los catalanes.

En una rueda de prensa para presentar una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) por una renta mínima para personas en riesgo de pobreza, Méndez ha explicado que tantas declaraciones pueden generar el efecto contrario en “los ciudadanos con derecho a voto, que son los que tienen la última palabra”.

“Tengo mis dudas”, ha dicho Méndez, acerca de si éste es un buen momento para que “salgan entidades financieras o se utilicen las declaraciones de líderes internacionales, que tienen una posición inequívoca indudable porque es lo que quieren para sus países”.

Y ha señalado que desde el Gobierno de Cataluña se ha incurrido en la misma dinámica, al dirigirse a las embajadas de los distintos países buscando un pronunciamiento al respecto.

Méndez ha asegurado que UGT no es partidaria de la independencia, pero ha manifestado la necesidad de “abordar una reforma de la constitución española” para que resuelva el déficit de participación democrática de la ciudadanía, articulando nuevos mecanismos que la aseguren.

Asimismo, ha considerado también indispensable iniciar un debate sobre política territorial, manteniendo los elementos de cohesión social pero con una nueva concepción de desarrollo de las competencias políticas.

Por su parte y en el mismo acto, el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha rechazado la idea de la segregación de una parte del Estado, al tiempo que también ha abogado por una reforma de la constitución que permita “un nuevo encaje territorial del Estado, como una alternativa a la situación actual que evite el choque de trenes que parece inevitable”.

“No veo la ventaja asociada a la independencia”, ha dicho Toxo, quien ha recalcado que “la ruptura del país, la segregación de una parte del Estado no favorece a los trabajadores ni a la sociedad catalana ni española”.