Periodistas bolivianos denuncian que Morales los amedrenta e induce a la censura

Periodistas bolivianos denunciaron hoy en una manifestación que el Gobierno los amedrenta e induce a la censura con la denuncia penal que presentó contra tres medios por supuesta distorsión de unas afirmaciones del presidente del país, Evo Morales.

“El poder político está amedrentado la libertad de expresión e induciendo a la censura y la autocensura”, dijo a Efe el presidente de la Asociación de Periodistas de La Paz, Antonio Vargas, que encabezó un mitin frente al Palacio de Gobierno.

A la manifestación acudieron decenas de informadores que lograron burlar el cerco y los retenes que la Policía puso en la Plaza Murillo, sede del Palacio de Gobierno y del Parlamento, para evitar que se movilizaran.

Otro grupo de informadores se manifestó en los alrededores de esa plaza, protagonizó incidentes con los agentes y protestó ante la Fiscalía de La Paz, donde el ministerio de la Presidencia presentó la semana pasada la denuncia contra la Agencia de Noticias Fides, de la Iglesia Católica, y los periódicos Página Siete y El Diario.

También hubo manifestaciones en la ciudad central de Cochabamba y la oriental Santa Cruz, que siguen a otras realizadas esta semana en el sur y el oeste del país.

Los tres medios fueron acusados por “incitación al racismo” por la publicación de una nota que supuestamente tergiversa palabras de Morales y que, según la denuncia, motivó las críticas contra él gobernante formuladas por dirigentes regionales del oriente del país.

Los medios de comunicación han defendido que no existe error, ni delito en sus noticias y titulares, y que si el mandatario se siente afectado debió haber recurrido a la ley de Imprenta en lugar de presentar una demanda por la vía penal.

El director del diario Página Siete, Raúl Peñaranda, declaró a los medios que no aceptan la actuación de un fiscal en este caso y sostuvo que las denuncias del Ejecutivo son “un hito negativo para la democracia y la libertad de expresión”.

Subrayó que es la primera vez en los 30 años de democracia en Bolivia, que se cumplen en octubre próximo, que el poder político denuncia penalmente a periodistas porque los antecedentes se remontan a los tiempos de las dictaduras.

“Lo que quiere el Gobierno es amedrentarnos y que la próxima vez que haya un discurso polémico de alguna autoridad, una metida de pata de una autoridad, que nos callemos, pero no lo van a lograr”, dijo Peñaranda.

En un discurso el 15 de agosto, Morales dijo que “en el oriente boliviano, donde todo el año se produce, yo digo solamente por falta de voluntad podemos ser tan pobres o no poder tener alimento, mientras en el Altiplano (occidente) es diferente: si hay helada, si no hay lluvia, si hay granizada, no hay alimento, es una verdad eso, pero en el oriente no, solo por flojos podemos hambrear”.

Según el Gobierno, los medios tergiversaron sus palabras con titulares como “Evo dice que si se hambrea en el oriente es por flojera”, “Evo acusa de flojos a los habitantes del oriente” y “Morales opina que el oriental es flojo y le critican por discriminador”.