Teresa Romero recibirá el sábado el título de Hija Adoptiva de Becerreá

Teresa Romero, la auxiliar de Enfermería que resultó infectada de Ébola, cuando atendía a un religioso que fue repatriado tras contraer la enfermedad, y que logró derrotar al virus tras pasar varios días en un estado muy grave, recibirá este sábado -día 5 de diciembre- el título de Hija Adoptiva de Becerreá.

Romero fue nombrada Hija Adoptiva de Becerreá, el municipio de la Montaña de Lugo en el que reside su madre, en un pleno extraordinario que se celebró el pasado 30 de diciembre.

El alcalde de la localidad, el socialista Manuel Martínez, confirmó que el acto de entrega de ese título se celebrará el sábado, a partir de las 19:00 horas, en la Casa da Cultura de Becerreá, y ha emitido un bando para animar a todos los vecinos del municipio a participar.

“Este es un pueblo generoso y solidario y lo volverá a demostrar”, dijo a la prensa Martínez, “abarrotando la Casa da Cultura para rendirle homenaje a una persona que se lo merece”, porque “estamos orgullosos de que esté entre nuestros vecinos”.

Después del acto protocolario, tendrá lugar una cena en la que participarán los familiares y amigos de Teresa Romero, la propia homenajeada, y los ediles de la Corporación municipal de Becerreá.

En su momento, Manuel Martínez propuso que Romero fuese declarada Hija Adoptiva de Becerreá, pero se encontró con la opinión contraria de los dos grupos de la oposición municipal, por lo que, al no contar con mayoría suficiente en el pleno, decidió posponer la decisión.

Sin embargo, al conseguir el PSdeG la mayoría absoluta en las últimas elecciones municipales, el regidor local tomó la decisión de cumplir “lo comprometido” con la propia Teresa y con el “pueblo”, porque sus vecinos están “orgullosos” de su “comportamiento y de su honorabilidad”.

“Pensamos lo mismo que pensábamos entonces”, remarcó Martínez, quien sostiene que el comportamiento de determinadas autoridades con Teresa Romero fue “impresentable”.

Se trata, añadió, “de una módica correspondencia” con su comportamiento, porque “nosotros no podemos darle la Legión de Honor, como en Francia, ni tampoco recibirla como recibió el presidente Obama” a los sanitarios norteamericanos que colaboraron en la lucha contra el Ébola.