UGT y CCOO quieren recuperar la concertación con el nuevo gobierno tras los comicios

UGT y CCOO quieren recuperar la concertación social con el nuevo gobierno que salga de las elecciones general del 20-D, después de considerar que con el actual este proceso ha sido “negativo”.

Los secretarios generales de los dos sindicatos, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo, respectivamente, se han expresado de esta manera en la presentación de la cátedra externa sobre sindicalismo y diálogo social creada por UGT y CCOO con la Universidad de Valladolid.

El secretario general de UGT ha asegurado, en declaraciones a los periodistas, que es “muy importante que se recupere el diálogo social en la próxima legislatura” para que la recuperación económica se traduzca “en buenos empleos y una reducción de la desigualdad y la pobreza”.

Cándido Méndez ha indicado que con la recesión económica “han aumentado las desigualdades de una manera brutal, pero no se ha debido tanto a que los ricos en España sean mas ricos, sino a que se han desplomado las clases medias”.

A juicio de Méndez, el riesgo que se puede correr en una etapa de crecimiento económico es que “como no haya correctores a través el diálogo social para generar buenos empleo y erradicar la desigualdad y la pobreza” es que “los ricos van a ser mucho más ricos y van a aumentar las desigualdades”.

El secretario general de CCOO ha pedido “situarse” en los próximo cuatro años y ha reclamado del gobierno que salga de las urnas el próximo 20 de diciembre que coloque a las personas “en el centro de atención”, lo que, a su juicio, solamente se puede hacer “a través del diálogo social”.

No obstante, ha advertido Fernández Toxo de que “cuando hay elecciones todos los partidos, incluido el PP, que ha tenido un itinerario bastante negativo en el diálogo social, hablan de la recuperación de la concertación”.

Después de reconocer que “se ha dejado atrás la recesión pero no la crisis”, el secretario general de CCOO ha señalado que “cada vez que ha habido diálogo social se han rendido beneficios a la sociedad”, pero que cada vez que ha fallado se ha deteriorado el reparto de la riqueza en detrimento de la inmensa mayoría“.

Fernández Toxo ha pedido que “se aprenda esta lección” y “en los próximos años tengamos otros escenarios”.

Por otra parte, Cándido Méndez ha insistido en la necesidad de derogar la reforma laboral de 2012, de la que ha dicho que fue “un señuelo” para contentar a las agencias de calificación y a los inversores extranjeros “a costa” de los trabajadores y de la innovación en las empresas“.

Para Cándido Méndez, la derogación de la reforma laboral “no es un objetivo, es una necesidad social”, como la reposición de los derechos laborales a los que ha afectado.

Méndez ha ofrecido datos que, según él, demuestran que la reforma laboral no ha cumplido “ninguno” de sus objetivos y ha señalado que ahora hay 436.000 parados menos que en 2001, pero también hay 541.000 activos menos, y si se compara el número de empleos a tiempo completo hay 560.000 menos.

“Hay menos cantidad de trabajo pero con la reforma laboral se trocea”, ha sentenciado.