El coste de las matrículas dificulta la llegada de universitarios extranjeros

El coste medio de matrícula y la duración de las carreras “superior” a la media de países de la UE, así como una formación escasa en inglés y otros idiomas, son algunas de las “debilidades” responsables de la “baja internacionalización” del sistema universitario español, según un informe oficial.

El documento “Estrategia para la internacionalización de las universidades españolas 2015-2020” propone medidas para corregir esta circunstancia como que al menos un 30 % de los estudios de grado y un 50 % de los de máster sean bilingües o en inglés.

Un grupo de trabajo coordinado por la Secretaría General de Universidades del Ministerio de Educación, con la participación de otros departamentos ministeriales, universidades, empresas y sectores sociales, ha redactado el análisis de situación y las propuestas de mejora de la estrategia.

Los expertos detectan pocas titulaciones conjuntas de universidades españolas en colaboración con extranjeras y “escasa presencia institucional” en redes, organismos y programas internacionales de carácter gubernamental.

El atractivo de los campus para captar talento es pequeño, se asegura, porque su posición es “baja” en los ranking universitarios globales y existe una “dificultad de reclutamiento internacional” de Personal Docente e Investigador (PDI) y de Administración y Servicios (PAS).

En el capítulo de “amenazas” se menciona la “dificultad” de retención y atracción de talento y de interacción de las universidades con empresas para proyectos internacionales; la limitación de recursos para la internacionalización y la renovación de plantillas por la crisis; y los problemas para seguir el alto ritmo de desarrollo metodológico y tecnológico de la formación electrónica.

Entre las fortalezas se citan la “calidad” de la docencia, la alta valoración de los graduados españoles en el extranjero; el potencial de la educación en español; la excelencia en ciertas áreas y departamentos específicos de I+D; las estructuras ya existentes de internacionalización y una participación “destacada” en foros del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) y de la UE.

El documento, que señala como “imprescindible” la colaboración de las autonomías, plantea de manera general la “mejora del marco legal” y la formación de personal y estudiantes en competencias de internacionalización; y además, propone:

- “Ventanas de movilidad internacional” de créditos formativos y prácticas en empresas de los alumnos e incorporación de criterios de internacionalización en la evaluación del PDI y el PAS.

- Normativa más simple y servicios de “acogida y apoyo” (plan “Welcome to Spain”) para facilitar la llegada y estancia de estudiantes y PDI extranjeros, lo que favorece, a su vez, campus españoles multilingües y multiculturales.

- Generalización de cursos de adaptación de idioma y cultura e iniciación académica para los extranjeros que lo necesiten.

- Agilización del reconocimiento de períodos de estudios y titulaciones del EEES y de países terceros: tiempo de respuesta máximo de “un mes” desde que se presenta la solicitud.

- Más oferta de programas conjuntos y dobles entre universidades españolas y extranjeras “de calidad”.

- Proyección internacional de una “imagen de marca” del sistema universitario español como puede ser “Study in Spain”.

- Una “guía” de orientaciones prácticas para la mejora de posiciones en los ranking universitarios globales.

- Desarrollo y actualización de estrategias institucionales de internacionalización de las universidades.

- Promocionar la participación en redes, proyectos y programas de excelencia europeos e internacionales como el de investigación e innovación Horizonte 2020 de la UE.

- Incentivar la adopción de las prácticas y recomendaciones de la UE en gestión de propiedad intelectual y transferencia de conocimiento en proyectos de I+D+i internacionales.

- Planes de acción conjunta de universidad y empresa para la internacionalización.

- Intensificar la cooperación institucional con el EEES, la UE, Iberoamérica y el Mediterráneo y acuerdos bilaterales con países de esas regiones y otras.

La financiación de las acciones propuestas se realizará a través de los programas regionales, nacionales y comunitarios con objetivos similares a los de la estrategia.

Además, se pretende incrementar la capacidad de atracción de recursos económicos por parte de las universidades gracias al incremento en el número de estudiantes extranjeros y de proyectos competitivos internacionales.

Entre otros datos del curso 2012-2013, la movilidad exterior de los estudiantes españoles (2,1 %) era inferior a la media de la OCDE (6,7 %); los extranjeros eran el 4,2 % de los alumnos de grado de las universidades españolas, cuando representaban el 8,5 % de media en la OCDE.

El 43,3 % de los estudiantes extranjeros que vienen a España procede de países de la misma lengua (26,1 % en la OCDE).