Los rectores avisan de que la beca universitaria ha bajado un 10,6% en dos cursos

La Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) ha señalado hoy que la beca media que reciben los universitarios ha descendido el 10,6 % entre los cursos 2011-2012 y 2013-2014, con un aumento de beneficiarios del 5,4 %.

En conferencia de prensa, los responsables de la CRUE han distinguido entre la cantidad presupuestada por el Estado para becas y ayudas generales, 1.411,02 millones de euros en 2014, y el gasto real ejecutado, 909,32 millones de euros en este mismo ejercicio.

En el año 2013 fueron 1.161,02 millones presupuestados y se gastaron 916,91 millones de euros.

El número de beneficiarios ha pasado de 305.454 en el curso 2011-2012 a 322.000 en 2013-2014.

La CRUE se basa para este análisis en el informe “Datos básicos del sistema universitario español. Curso 2013-2014” y de la Secretaría de Estado de Educación, FP y Universidades de 2014.

Advierte de que no se tienen en cuenta los beneficiarios ni importes de las becas de colaboración (de 6,3 millones de euros en 2005 a 8,9 millones de euros en 2014).

El vicepresidente ejecutivo de la CRUE, Juan Juliá, ha añadido que los solicitantes de beca que cumplen los requisitos han aumentado un 9 % desde 2012.

Así, ha constatado una tendencia “a la baja” de la ayuda recibida por el alumno universitario ya que la nueva parte de cuantía variable permite ajustar el presupuesto a la demanda, de forma que la beca “ha dejado de ser un derecho” de los estudiantes.

Dada la situación económica, ha añadido, habrá más solicitantes, según ha augurado, pero la reducción de las cantidades desanimará a las familias.

El presidente de la CRUE, Manuel López, ha insistido en que la nota media mínima vuelva a ser un 5 para acceder a la beca en el primer año de carrera, frente al 5,5 establecido ahora.

Ha calculado que entre un 10 y un 15 % de los nuevos universitarios no pueden obtener la beca por incumplir este requisito, cuando debe garantizarse la igualdad de oportunidades.

“Tenemos una universidad más cara con menos becas”, ha dicho en alusión también a la subida de las tasas de matrícula en cursos anteriores, aunque tienden a la congelación o subidas mínimas en éste. “Si uno sube el precio, baja la demanda”, ha apostillado.

Ha aludido a datos del Ministerio de Educación para indicar que el gasto en becas y ayudas cayó en 75 millones de euros en el curso 2013-2014 respecto a 2012-2013 y en 210 millones en comparación con los dos anteriores. También ha reclamado que se “reactive” el Observatorio de Becas.

Los rectores han considerado “imprudente”, además, la implantación ya de grados de tres años, aunque sea voluntaria, y han advertido de que encarecería el coste para los alumnos por la necesidad de tener que estudiar dos años de máster.

El presidente de la CRUE ha pedido que, si finalmente se da esta posibilidad -como ha propuesto el Ministerio-, haya una moratoria de “varios cursos” antes de que las universidades tengan opción de implantar las titulaciones de 180 créditos.

Ha defendido que el sistema vigente de titulaciones de cuatro cursos (240 créditos) ha mejorado el rendimiento académico medio de los alumnos entre un 15 y un 18 % en comparación con el modelo anterior de ciclos universitarios.

Además, se ha reducido de un 18 a un 7 % la tasa de carreras con menos de 20 alumnos de nuevo ingreso.

Los rectores echan de menos un informe sobre los efectos que tendría la convivencia de titulaciones de cuatro y de tres años.

El vicepresidente de la CRUE Julio Luis Martínez ha asegurado que el sistema de grados de cuatro años está “funcionando”, aunque sea mejorable, y se corre el riesgo de “desequilibrarlo” y convertirlo en un “caos”.

Juliá ha indicado que las universidades españolas se encuentran entre las más reguladas de Europa, lo que no favorece su autonomía real.

Según ha propuesto el Ministerio, las universidades podrían implantar grados de tres años desde el curso 2015-2016.

Los rectores han valorado que la tasa de reposición de los profesores permanentes pase del 10 al 50 % en los presupuestos del Estado de 2015, lo que podría suponer la contratación de 400 o 500.

“No es la solución, pero sí el buen camino”, ha dicho López, atraer personal joven y con talento y poder competir con otras universidades del mundo.

Sobre los presupuesto de I+D+i, ha agradecido que suban el año próximo, pero ha recordado que han caído un 31 % desde 2009.

“Si España quiere salir de la crisis, no podemos seguir con estos presupuestos”, ha rematado.