En medio de la crisis de los refugiados, los policías eslovenos inician una huelga

La policía eslovena, sobrecargada desde octubre por el trabajo relacionado con la gran afluencia de refugiados de Oriente Medio, inició hoy una huelga para reivindicar un aumento salarial del 35 %, informa la agencia de noticias eslovena STA.

Según los dos sindicatos mayoritarios de la policía eslovena, la participación en el paro es muy alta.

“Queremos soluciones urgentes y eficaces, queremos impedir el estancamiento de la situación de seguridad en Eslovenia”, dijo a la prensa local el líder sindical Zoran Petrovic.

El representante de la policía explicó que tienen mucho trabajo por el tránsito de refugiados, al tiempo que quedan pocos agentes para ocuparse de otros asuntos en el resto del país.

Además del aumento salarial, los policías reivindican también el pago regular de todas las horas extraordinarias y una mejora del equipamiento, que les garantizaría un trabajo más seguro.

El Gobierno esloveno había indicado ya ayer que no espera que la seguridad pública se vea afectada por la huelga.

La ministra del Interior, Vesna Gyorkos, dijo el martes en una rueda de prensa que las demandas de los agentes son “legítimas” y que serán debatidas por el Gobierno hoy.

La protesta sindical tiene lugar tras el fracaso de las negociaciones entre el Gobierno y los sindicatos, cuyas exigencias le costarían al Estado unos 90 millones de euros anuales, explican los medios locales.

Según datos del sindicato de policías, los rangos más bajos y nuevos ganan en torno a 1.000 euros brutos al mes, frente al salario medio de 1.500 euros en el país balcánico.

Hasta ahora no se ha informado de que la huelga haya ocasionado cuellos de botella u otros bloqueos en el tránsito de los refugiados por Eslovenia, asegura la prensa local.

Según datos oficiales, ayer entraron en Eslovenia desde Croacia unos 5.300 refugiados, y esta mañana, otros 1.800.

Desde que la “ruta balcánica” de refugiados se desviara a mediados de octubre hacia Eslovenia, por este diminuto país han pasado hasta hoy más de 230.000 en su camino hacia Austria y luego Alemania.