La Fundación Doctor Barajas implanta 35 audífonos a mayores sin recursos de Tenerife

La mesa presidencial, de izquierda a derecha, Álvaro Marcos (Fundación CajaCanarias), José Juan Barajas (Fundación Doctor Barajas), Cristina Valido y José Domingo Pinto (La Caixa)

Tenerife Ahora

Santa Cruz de Tenerife —

La Fundación Doctor Barajas para la Prevención e Investigación de la Sordera (FDB), que preside el doctor José Juan Barajas, puso en marcha en 2016 una nueva edición (la segunda) de su programa insular de atención a la sordera en el colectivo de mayores con escasos recursos económicos. El Cabildo de Tenerife, a través del área de Acción So­cial, participó como copatrocinador de esta iniciativa, la destinada a promover la auto­nomía e inclusión social de las personas con discapacidad auditiva de la isla que tengan carencia de recursos económicos.

El plan ha beneficiado a 35 personas en Tenerife (a las que se les implantó audífonos), con casi 60 mayores evaluados, tal y como se mostró este miércoles en el acto de clausura del programa celebrado en el salón de actos de la Fundación CajaCanarias. El objetivo de este proyecto es favorecer la comunicación y la plena integración social de los mayores a través de la adaptación de audioprótesis para aumentar su calidad de vida. Esta iniciativa consolida “un plan ambicioso que persigue que los mayores de la isla mejoren su calidad de vida”.

Además de la Corporación insular, el proyecto cuenta con el copatrocinio del Gobierno de Canarias, la Fundación CajaCanarias, la Obra Social La Caixa, la Fundación Canaria Cajasiete-Pedro Modesto Campos, el Ayuntamiento de La Laguna, la Clínica Barajas y la propia Fundación Doctor Barajas.

El presidente de la Fundación Doctor Barajas, José Juan Barajas, ha destacado la im­portancia de esta acción debido a que “los mayores con discapacidad auditiva presentan un grado cognitivo perfecto”. También aseguró que “vivir es que puedan interaccionar unos individuos con otros”, razón por la que el proyecto merece que “la sociedad y las entidades colaboradoras sigan teniendo fe en este plan, que mejora la calidad de vida”.

El proyecto de la Fundación se llevó a cabo con mayores de 64 años que carecían de medios económicos. Los seleccionados fueron valorados por el otorrino y el audiólogo y, si cumplieron los requisitos médicos y audiológicos, se les aceptó en el proyecto y entonces se realizó el proceso de adaptación protésica (con 35 mayores en 2016, de 60 evaluados), lo que supuso la fabricación del molde y varias citas más para colocar y regular el audífono.

El proceso estuvo acompañado de un seguimiento social del beneficiario para estimar su nivel de autonomía y cómo la discapacidad auditiva influía en su calidad social. El proyecto además incluyó la realización de talleres destinados a los beneficiarios y sus familiares sobre cuidados diarios del oído y el audífono, así como pautas de comu­nicación y de inclusión con el entorno familiar y social.

La FDB es consciente de lo mucho que se puede hacer para dotar a más mayores sin recursos de mejor audición, lo que implica una calidad de vida más digna. La óptima comunicación de las personas muchas veces es un objetivo inalcanzable, cuando no existen medios económicos para financiar una prótesis. Por ello, la FDB estudia los casos y ve si puede actuar con fondos propios y de sus colaboradores.

Etiquetas
stats