Santa Cruz dice adiós a la ochentera Sardina
La Sardina del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife ardió este miércoles, una vez llegó a su fin la procesión fúnebre en la que el pez de seis metros de largo, de imagen ochentera, paseó por las calles de la capital tinerfeña entre el llanto de apenadas viudas.
Inspirada en el chicharro que sirve de imagen al cartel anunciador de la fiesta, obra de Javier Torres, la Sardina de este año medía 6 metros de largo, 3,5 metros de alto y 1,55 metros de ancho. Para confeccionarla se utilizó cartón y papel reciclado.
El entierro, en el que participó como es tradicional, la Afilarmonica Ni Fú Ni Fá, partió de la calle Juan Pablo II y recorrió Méndez Núñez, El Pilar, Villalba Hervás, La Marina y la avenida Marítima, donde la sardina fue incinerada después de las doce de la noche en la Alameda. Momentos antes sonó la gaita de despedida entre aplausos del público.
Entrada la noche las plañideras y los deudos de la Sardina pudieron bailar en la plaza de la Candelaria al son de la orquesta Tejina.
Con el Entierro de la Sardina, Santa Cruz despide a Don Carnal, aunque los carnavaleros continuarán la fiesta este fin de semana de Piñata, en el que más de 40 artistas protagonizarán las actuaciones del Carnaval de Día programado para este sábado.
