Industria presenta 97 medidas para convertir la industria en motor económico

El Ministerio de Industria, Energía y Turismo ha presentado hoy la Agenda para el Fortalecimiento del Sector Industrial en España, un plan de acción con 97 medidas encaminadas a mejorar su competitividad y potenciar su papel clave a fin de convertirse en uno de los motores de la economía española.

La agenda -que incluye las actuaciones más relevantes para la industria del plan de medidas para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia aprobado por el Gobierno el pasado mes de junio- recoge las aportaciones planteadas por las comunidades autónomas, la patronal CEOE, los sindicatos y las empresas, tal y como ha explicado el ministro de Industria, José Manuel Soria.

Las medidas se estructuran en torno a 10 líneas de actuación, entre las que destaca la estimulación de la demanda de bienes industriales, un suministro energético estable, el refuerzo de la estabilidad del marco regulatorio, el apoyo al crecimiento de las pymes españolas, un modelo educativo acorde a las necesidades de las empresas o un incremento de la eficiencia.

Dentro del ámbito nacional cobra especial importancia el estímulo de los sectores con “efecto tractor” como el de la automoción, pero también la inversión en maquinaria y bienes de equipo, la modernización de la industria o la mejora energética.

También el impulso del sector espacial, la mejora de las interconexiones de transporte, el incremento de la flexibilidad laboral, el apoyo al sector de las telecomunicaciones, a la unidad de mercado o contar con un suministro energético estable y competitivo.

Y es que, el sector industrial (incluyendo la energía) representa el 15,9 % del PIB y genera más de 2 millones de empleos, un 13 % del total de toda la economía, con un peso de las exportaciones industriales en el PIB que representa más del 20 %, según ha explicado la secretaria general de Industria, Begoña Cristeto.

El objetivo de esta herramienta es, por tanto, lograr que el sector industrial se convierta en los próximos años en uno de los motores de la economía, hasta llegar a representar el 20 % del PIB en 2020 y generar empleo cualificado.

Otra de las medidas estrella es la mejora de la financiación no convencional (que actualmente supone el 20 %) gracias al capital riesgo o a los bonos corporativos.