La cumbre del plátano se queda en una simple entrega de documentos

Empaquetado de plátanos en Canarias.

Román Delgado

Santa Cruz de Tenerife —

La reunión de este viernes, convocada inicialmente para analizar la situación del sector del plátano en Canarias, se desinfló casi desde el minuto uno. La cita, a la que acudieron todos los agentes económicos y sociales reconocidos y vinculados a esa actividad agrícola (la principal en Canarias) a petición de la Consejería de Agricultura, sirvió para muy poco, salvo la recepción de varias copias de borradores de decretos territoriales sobre el plátano, normas que el citado departamento autonómico pretende reformar en breve. De pica, bajos precios y pérdida de renta de los cosecheros este año, poco o nada se mencionó en esta ocasión.

El que pudo ser un foro amplio de análisis de la coyuntura económica y social que afecta al sector agrícola estrella en las islas se desvaneció nada más tomar la palabra el consejero de Agricultura, Narvay Quintero, que dejó claro que la reunión se iba a centrar en la entrega, para ejercer la consulta, de dos borradores de decretos sobre el plátano que deben ser modificados en breve, en parte porque hay que trasponer nueva normativa comunitaria.

Uno de ellos es el que regula las condiciones de operatividad de las organizaciones de productores de plátanos (OPP) e incluye los requisitos de constitución de éstas (entre otras variables, número de agricultores y kilos comercializados, ahora en 30 millones por año), y el otro, el que corresponde a la norma que permite la gestión reglada de las cantidades de referencia para abonar la ayuda directa del plátano por agricultor y el reparto de las llamadas reservas; o sea, el apoyo público que se abre a agricultores de nueva incorporación o a los que amplían la superficie cultivada, nunca por encima de la hectárea.

Esas dos acciones representan el balance de lo ocurrido esta mañana, con el añadido de la explicación por parte de los gestores públicos en Agricultura de que las propuestas de las organizaciones profesionales agrarias (APA) y de la propia Asprocan deberán presentarse antes del 2 de noviembre próximo, para que, a partir de esa fecha, se convoque una nueva cita. Entonces se entiende que ya se alcanzará el consenso en torno a la redacción definitiva de los nuevos decretos canarios.

Esto hubo, y poco más, pues se pasó por encima de la pica, con dos semanas consecutivas sin órdenes semanales de inutilización de fruta, la 36 y la 37 (la actual), y del esperado análisis o búsqueda de soluciones al enorme problema de los bajos precios percibidos por el cosechero en la actualidad, algo que ha afectado a una gran mayoría de los plataneros en lo que va de año.

Un asistente a la cita de esta mañana dijo con sorna que, para este resultado, “no hubiera derrochado tiempo y dinero”, en alusión a que los borradores de decretos se pudieron remitir por email a las organizaciones objeto de consulta.

En la reunión de hoy, con versión previa en exclusiva para los integrantes de Asprocan (y luego todos juntos), se convocó a las organizaciones COAG-Canarias, Asaga-Canarias, UPA y Palca, más Asprocan. Pese a que había trascendido que también iba a estar la autodenominada Plataforma por un Precio Justo, con implantación sobre todo en La Palma, representantes de este colectivo no asistieron debido a que aún no está reconocido como asociación de forma legal.

Quizá por ese motivo se había bloqueado la presencia de ellos en la cita de hoy, aunque antes ya el consejero de Agricultura se había reunido con ellos: el viernes anterior, el de la semana pasada (la primera fecha puesta para la reunión de este viernes). La Plataforma organizó con éxito la manifestación del 2 de septiembre pasado en Santa Cruz de La Palma.

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