El Consejo Andaluz de Turismo aprueba simplificar las condiciones para los campos de golf

La comisión permanente del Consejo Andaluz de Turismo ha aprobado el texto de decreto por el que se modifica el decreto regulador de las condiciones de implantación y funcionamiento de los campos de golf en Andalucía, un cambio y un texto que cuenta con la oposición de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA). Fuentes de la Junta de Andalucía han confirmado que dicha comisión permanente ha abordado a inicios de esta semana el borrador, dentro del proceso de tramitación del mismo. Por el contrario, sindicatos y consumidores han respaldado la modificación. Tras pasar por la comisión permanente, debería ir a consejillo (reunión que precede el Consejo de Gobierno) para iniciar su posterior tramitación en el Parlamento de Andalucía, “donde los diversos agentes también esperan hacer alegaciones”, según las fuentes.

Desde la CEA han justificado su oposición porque “no se han recogido ninguna de las observaciones” que han presentado, “en nombre especialmente de la Federación Andaluza de Golf”. Han indicado que en el decreto inicialmente “se creó la figura del campo de golf turístico para flexibilizar y para que se pudieran hacer” en áreas interiores y rurales, “pero con la modificación que se propone y los criterios que se establecen, ni siquiera el campo de Valderrama se podría hacer”. Esperan no obstante “poder hacer sugerencias durante la tramitación parlamentaria.

El borrador de decreto por el que se modifica el existente reforzará todos los aspectos referentes a protección medioambiental y pretende simplificar los procedimientos “para que haya más garantías para el promotor y para la administración”, según la Consejería de Turismo y Comercio. Desde esta consejería resaltan que el decreto “fija y concreta aún más los campos declarados de interés turístico”, con aspectos como la edificabilidad del suelo, de manera que se establece que un campo de golf de interés turístico de 18 hoyos no podrá tener más de 300 viviendas“.

Las fuentes han indicado que esta norma “no tiene carácter retroactivo”, de forma que los proyectos que estén en tramitación “podrán seguir siendo tramitados y se resolverán por la normativa vigente cuando se presentó la solicitud”, aunque el borrador apunta que los promotores que lo pidan podrán acogerse a la nueva normativa, “conservándose los trámites ya realizados que no se vean alterados por la nueva regulación”.