El Gobierno de Moreno Bonilla da carpetazo a su promesa electoral de bonificar el peaje de la autovía Sevilla-Cádiz

En uno de sus actos de campaña electoral en Sevilla, el pasado mes de noviembre, el líder del PP andaluz, Juan Manuel Moreno, anunció una promesa estrella muy concreta: si soy presidente de la Junta, vino a decir, bonificaré el peaje de la AP-4 entre Sevilla y Cádiz, con un coste actual de 7,42 euros por vehículo. Lo anunció ante un nutrido grupo de simpatizantes del PP y un corrillo de periodistas, que le preguntaron si su equipo de campaña había calculado el coste aproximado de esa medida, habida cuenta que el Gobierno central ya ha anunciado el fin del peaje para el 31 de diciembre de este año. Moreno respondió que sí, que eso estaba calculado y que “no es tanto”.

Una vez investido presidente de la Junta de Andalucía, tras las elecciones del 2 de diciembre, el líder popular conoce con exactitud que el coste para su Gobierno de aquella promesa electoral es de 4,5 millones de euros al mes “de aquí a diciembre”. Así lo ha subrayado este martes la consejera de Fomento, Marifrán Carazo, la encargada de confirmar que el Ejecutivo andaluz no cumplirá la promesa de Moreno Bonilla, y que prefiere “esperar” a que el nuevo Gobierno central de Pedro Sánchez consuma la eliminación del peaje en la fecha ya prevista. “La liberalización del peaje corresponde al Gobierno de España y no es el momento de poner encima de la mesa la posibilidad de que la Junta asuma el coste del peaje antes de que finalice en diciembre”, ha asegurado Carazo, a preguntas de los periodistas. 

El reconocimiento de que esta propuesta estrella no se va a ejecutar, pese a lo prometido, se ha hecho público a cinco días de las elecciones municipales del 26 de mayo, dando armas contra el PP a sus rivales políticos tanto en Sevilla como en Cádiz, donde esperan el fin del peaje desde hace años. Los populares aspiran a arrebatar la alcaldía al PSOE en Sevilla, y a Adelante Cádiz en la capital gaditana.

La explotación privada del peaje de la AP-4 entre Sevilla y Cádiz culmina el 31 de diciembre, cuando expira la última prórroga de la concesión mediante la que Abertis gestiona y explota la citada carretera. La Junta andaluza ha dado carpetazo a la promesa de Moreno Bonilla, pero enseguida ha girado el foco de la responsabilidad hacia el Gobierno central, en caso de que a última hora decida prorrogar dicha concesión.  Carazo ha expresado dudas al respecto porque el ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, “ha planteado pagar las pensiones de los españoles a costa de los peajes en carreteras que pertenecen al Gobierno de España”, según ha indicado Carazo, quien ha reiterado que la Junta no quiere “ni que se mantenga ese peaje ni otros” que existen actualmente.

En esa línea, la consejera ha insistido en que el peaje “vence el 31 de diciembre, y lo lógico y lo que había anunciado” el ministro Ábalos “era que iba a dar por concluido ese peaje, eso es lo que este Gobierno demanda y lo que el Gobierno anunció”, según ha abundado Carazo, quien ha concluido subrayando además que “se lleva muchos años pagando por ese peaje”, y “con lo que hemos pagado” al respecto “podríamos haber construido una autovía de la misma extensión que por la que se paga el peaje”.