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El PP-A insiste en que votará en contra de la investidura de Susana Díaz

Rojas (PP-A) cree que un posible pacto PSOE-Podemos-C's-IU dejaría a Andalucía "estancada en el furgón de cola"

Olga Granado

El portavoz parlamentario del PP-A, Carlos Rojas, ha expuesto este martes que su formación no respaldará la investidura de Susana Díaz como presidenta de Andalucía, después de que haya sido la más votada pero sin mayoría absoluta, pero tampoco van a presentar a su candidato para hacerle frente. Por tanto, en principio, la postura del PP-A será votar en contra en la primera y en la segunda vuelta si ésta se produjera, que sería si Susana Díaz no lograra votos suficientes en el primer intento. “No vamos a estar con la investidura”. Es el único “no” con el que ha explicitado que votarán en contra porque cuando se le ha preguntado por la posibilidad de una abstención -que serviría a la líder del PSOE-A en una segunda vuelta- ha dicho, sin más explicaciones: “Creo que ya lo he dejado claro”.

“Si ha declarado con tanto aplomo que va a gobernar en solitario, seguramente ya tenga las alianzas necesarias, y garantizada la investidura. Ella es la que tendrá que explicarlo. El PP-A no va a estar en ninguna alianza, ni para la investidura tampoco, porque somos la alternativa. Corresponde a ella decir qué tipo de alianza ha forjado”, ha continuado el popular, en la línea de lo anunciado este lunes desde Génova.

En la misma línea, Carlos Rojas ha repetido: “No vamos a hacer ningún movimiento encaminado a encabezar una candidatura para la investidura, como hizo el PSOE-A hace tres años. Es Susana Díaz la que tiene que buscar alianzas para su investidura, en las que el PP-A no va a estar, porque queremos ser alternativa y estaremos en la oposición, que es donde los andaluces nos han situado”. En todo caso, ha incidido: “Me resulta curioso oír a Susana Díaz hablando todo el día de la lista más votada, cuando en los últimos tres años nunca se acordó. (...) La coherencia brilla por su ausencia en el PSOE-A”.

Sobre la contradicción entre esta nueva postura y la que mantuvo desde la precampaña el presidente del PP-A, Juan Manuel Moreno, instando a que el PSOE-A se comprometiera a respetar la lista más votada, no lo ve como tal. “No hay ninguna contradicción. El presidente del PP-A hizo en su momento la oferta para la lista más votada y Susana Díaz no dijo absolutamente nada. El respeto a la lista más votada pasa por que no vamos a formar ningún tipo de pacto para ir a una investidura como hizo el PSOE-A”, ha matizado.

En todo caso, si los 33 diputados del PP-A votan en contra, Susana Díaz continúa con opciones de salir elegida en la primera votación, si consigue mayoría absoluta sumando el respaldo de otras formaciones. Pueden ser los nueve diputados de Ciudadanos o los 15 de Podemos, que bastarían por sí mismos en cada caso, o estos dos, porque los cinco de IU no son suficientes. De momento, Ciudadanos ha vinculado un respaldo a la investidura de Susana Díaz a que ésta exija la dimisión de los expresidentes Manuel Chaves y José Antonio Griñán, imputados por el Tribunal Supremo en el caso ERE, mientras que Podemos ha insinuado que su postura se sometería a la consulta de la militancia. Y en este contexto, la presidenta en funciones ha dicho que ella negociará con todas las fuerzas “sin condiciones”.

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