Los nacionalistas de Somos Andaluces presentan dos listas para el 26J
El partido Somos Andaluces, en el que sus impulsores llevaban trabajando desde 2014 pero no consiguieron registrarlo hasta finales del pasado año, ha logrado el objetivo que se marcaba entonces su portavoz, Salvador García Urbano: concurrirá a las elecciones generales si volvían a convocarse.
Inscrito en el listado como “Partido Somos Andaluces por Andalucía y los Pueblos (AND)”, han completado candidaturas por Córdoba y Málaga, con unos cabezas de lista elegidos por primarias y sin necesidad de avales, que son poco conocidos, porque no hay ninguno de los fundadores en estos primeros puestos. En cambio, sus candidaturas por Cádiz, encabezada por Rosa María Armesto Canalejo, y Huelva, lideradas por José María López Gómez no han sido proclamadas.
En el caso de Córdoba, el número 1 es Miguel García Mohedano, y en Málaga, provincia en la que se ha gestado este proyecto, Francisco Javier Bautista Venegas. Este último, ingeniero de profesión, ha explicado que se ha decidido por la política, en un momento en el que la desigualdad en Andalucía es más que alarmante: “Doy el paso, para desde mi convencimiento nacionalista para aportar todo de lo que soy capaz, para cambiar el trágico estado de atraso y pobreza de Andalucía, tras décadas de verdadero régimen del PSOE-A”.
Somos Andaluces se presenta como un partido “federal” y “nacionalista”, pero con un convencimiento: “El nacionalismo no destruye, construye puentes entre los pueblos”. Con Pedro Altamirano como coordinador, está formado por exmilitantes de distintas formaciones -desde C's a UPyD, pasando por el PA o el PSA, entre otros- y también por gente que nunca ha militado.
Dicen contar ya con más de 300 militantes e implantación en las ocho provincias. Su objetivo es ser la voz que creen que Andalucía no tiene asegurada en otras opciones políticas para el futuro debate territorial. “Desde nuestra soberanía como pueblo, decidiremos los destinos de Andalucía”, sostienen. Sus miembros aseguran, además, estar en condiciones de presentarse a las elecciones generales en caso de que se repitieran este año.
