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El choque político no cambia el ritmo de las obras del tranvía en Sevilla pese a las acusaciones de “ratonera” y “caos”

Aspecto que presenta la avenida de San Francisco Javier cortada por la obra del tranvía.

Antonio Morente

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“¿Las obras de ampliación del tranvía generan molestias? Sí. ¿Siempre es mejorable la coordinación? Sí”. Estas afirmaciones a las dos preguntas retóricas que se hacía la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Sevilla, Adela Castaño, es lo más cerca de admitir algo que ha estado el gobierno municipal en relación con un proyecto que este jueves ha protagonizado un pleno extraordinario reclamado por el PP para “replanificar y reorganizar” los trabajos. Una sesión plenaria, por cierto, que no ha servido para nada porque todo va a seguir como estaba planificado, por mucho que PP, Cs y Vox hayan denunciado que el barrio de Nervión es “un caos” de tráfico por la “ratonera” en que lo han convertido las obras.

El portavoz del PP, Juan de la Rosa, hizo un complicado equilibrio, ya que insistió en que el objetivo de su formación era cambiar el programa de trabajo de la ampliación del Metrocentro para “minorizar las molestias”. “No estamos en contra del proyecto, sino del momento” elegido para ejecutarlo, con otros puntos principales de la ciudad (Torneo, Ronda Histórica, Cruz Roja...) también en obras. Pese a esta declaración de intenciones, De la Rosa no desaprovechó para lanzar la puya de que la iniciativa es poco menos que innecesaria, ya que este trayecto lo cubren hoy cuatro líneas de autobuses urbanos, el Cercanías y en el futuro lo hará la línea de Metro.

Esta aparente contradicción fue a la que se agarró Adela Castaño para subrayar el “papelón” de un portavoz del PP “que no sabe ni lo que está defendiendo”. A su juicio, los populares culminaron un “cambio de tercio”, porque inicialmente aspiraban a paralizar la obra del tranvía y al final se han quedado en solicitar mayor coordinación. Para este viaje, vino a decir, no hacían falta las alforjas de un pleno, “no han tenido la valentía de decir a lo que venían”.

“No nos hagan perder el tiempo”

En esa misma herida hurgó el portavoz de Adelante Sevilla, Daniel González Rojas, formalmente en contra de la ampliación del Metrocentro pero que calificó de “teatrillo” la escenificación del PP y se negó a “participar de este circo”. “No nos hagan perder el tiempo”, instó a los populares, a los que recordó que “las obras siempre van a generar molestias, caos de movilidad y quejas vecinales” que “hay que asumir”. Eso no quitó para que le reprochase al gobierno local que todo lo que está pasando es “producto de las prisas para tener algo en las elecciones” del año que viene, hasta el punto de que de su formación “va a seguir trabajando” para que el alcalde, Antonio Muñoz (PSOE), “no inaugure el tranvía” antes de los comicios.

Lo de “la foto que dé rédito electoral antes de las elecciones de 2023” ya lo había avanzado Juan de la Rosa, y también se subió a este carro el portavoz de Ciudadanos, Álvaro Pimentel, que lamentó que “el normal funcionamiento de la ciudad no puede estar supeditado al interés político de un grupo”, en este caso el PSOE. Cs ha sido el único grupo municipal que ha acompañado a los socialistas en este proyecto, lo que no quita para que reclame “un poco de sentido común” e insista en que el gobierno municipal “engañó” con unos plazos que situaban el final de los trabajos en diciembre de 2022.

Por su parte, la portavoz no adscrita, Sandra Heredia, también reprochó que se convocara un pleno extraordinario para una cuestión que podría haberse reclamado por los cauces habituales, sobre todo teniendo en cuenta que “Sevilla tiene problemas mucho más graves”. Desde Vox, su portavoz, Cristina Peláez, aprovechó para cargar de nuevo contra una ampliación del tranvía que “carece de utilidad” y que está provocando que “los vecinos se quejen de que no están suficientemente informados”. “No se puede gobernar a golpe de ocurrencia, porque salen chapuzas”, lamentó.

La cuestión de los árboles

Por cierto, que Peláez fue la única que hizo referencia a los árboles que se están arrancando de la zona de obras para llevarlos a otros puntos, “un traslado en el que no se puede confiar”. González Rojas, de Adelante Sevilla, también pidió al gobierno local “un poquito de cabeza” porque ya están “talando” los árboles de Luis de Morales, una avenida que no estará en obras hasta finales de año.

En esta línea, la asociación Tranvía Verde ha reiterado su denuncia sobre que “no se está siguiendo el procedimiento de trasplante” anunciado por el propio Ayuntamiento, una operación que se inició “con el informe desfavorable del propio servicio municipal de Parques y Jardines”. A la falta de criterio con la que, a su juicio, se está desarrollando la operación unen su denuncia de que los ejemplares no son conducidos a un vivero o a una instalación propicia para su conservación, sino que son llevados a los terrenos de una depuradora “sin un plan de riego o cuidado específico”. 

“Estamos ante una cadena de mentiras y un absoluto paripé del gobierno municipal”, denuncia el colectivo. “Con profundo dolor lamentamos la muerte de estos árboles, por los que llevamos peleando desde 2018, y esta funesta pérdida para el medioambiente de la ciudad”, extremo que niega un Ayuntamiento que insiste en que los ejemplares se ubicarán en otras zonas y que el resultado final de la obra (un proyecto que en conjunto ha bautizado como Respira Nervión) dejará un entorno más sostenible y con mayor presencia vegetal.

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