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Rocío Jiménez, una persona con discapacidad intelectual que previene de la violencia de género: “Hay machismo en todos lados”

Rocío Jiménez, durante su conferencia este miércoles, junto a la decana de Ciencia Sociales de la UPO, Rosa Díaz

Javier Ramajo

Se dedica a sus cosas, como ella dice, pero habla con este periódico horas antes de pronunciar una conferencia en la Universidad Pablo de Olavide. Rocío Jiménez, una joven con discapacidad intelectual de Sevilla de 27 años, es diplomada de la primera edicion del programa 'Formación para el empleo y la vida autónoma de personas con discapacidad intelectual' (FEVIDA). Su paso por este título propio que oferta la UPO le ha permitido, entre otras cosas, formarse y prepararse para sensibilizar y formar sobre las violencias, y específicamente, las violencias que sufren las mujeres.

“Voy a hablar del machismo que hay en las canciones, en los anuncios. Hay machismo en todos lados. Me gustaría que la juventud se conciencie de que todos tenemos los mismos derechos”, asegura, aunque acto seguido duda de si tendrá éxito en su exposición porque “la juventud de ahora....”. Y deja unos largos puntos suspensivos sobre la recepctividad de esos mismos consumidores de canciones, anuncios, etc. ante su conferencia titulada 'Prevención de la violencia de género'.

Perteneciente a la asociación Down Sevilla, Rocío Jiménez protagoniza un encuentro de la segunda edición del programa FEVIDA, un título propio de la UPO que cuenta con la financiación de la Fundación ONCE y el Fondo Social Europeo, y que forma a 17 jóvenes con discapacidad hasta el próximo mes de mayo. Su alumnado tuvo la oportunidad hace unas semanas de mantener una reunión con el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, en la que le trasladaron una batería de propuestas para mejorar la vida en la ciudad hispalense.

El objetivo del curso es conseguir que sus integrantes alcancen las habilidades necesarias para aumentar sus posibilidades de inserción laboral, accediendo a empleos en la modalidad del empleo con apoyo. La formación, que se desarrolla en una veintena de universidades españolas, permite a las personas con discapacidad intelectual formar parte de la comunidad universitaria.

La selección de los estudiantes en esta edición ha sido realizada por la asociación Paz y Bien y por la citada Down Sevilla. Las prácticas en empresas este año se han ampliado a 100 horas para el alumnado que, por otra parte y dentro de la semana de inmersión comunitaria para la vida autónoma, se alojará en la residencia Flora Tristán.

El título se desarrolla en siete módulos que abarcan la formación en comunicación, habilidades sociales, emocionales y entrenamiento cognitivo; formación específica/vocacional; formación en habilidades laborales; apoyos para la autonomía; prácticas en empresa; acompañamiento académico de apoyo en la vida del campus y relaciones familiares.

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