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“Allá Griñan, aquí lo que sobran son comparecencias”

Fernando Vicente

El secretario general de la UGT Andalucía, Manuel Pastrana, está convencido de que detrás del reto del PP para que Griñán comparezca en el Congreso de los Diputados no hay más que una maniobra política de distracción. “Es que yo creo que aquí lo que sobran son comparecencias. Aquí, la que tiene que actuar es la instrucción judicial para que avance el proceso lo más rápidamente posible”.

Pastrana se sorprende de que alguien pueda pensar que su organización sindical también pueda ser llamada a comparecer: “Sería la primera vez que nos llaman para algo así”. Y, aunque asegura que no tendrían “ningún inconveniente, todas nuestras cuentas son públicas”, añade: “Aquí, a UGT Andalucía lo que le interesa, y estamos personados en la causa, es ayudar para que la instrucción sea lo más ágil y clarificadora posible, para que aquellos que han tenido responsabilidad, paguen anta la justicia lo que hayan hecho lo más rápidamente posible”.

Tras afirmar categóricamente que “en cuanto a la trama de los sindicatos de la que se habla, yo puedo asegurar que es rotundamente incierto”, Manuel Pastrana lanza un “Allá Griñán, pero ahora lo que corresponde no es facilitar que el PP establezca una cortina de humo sobre sus propias cuitas”.

Es más, dice, “comprendo que al PP le viene muy bien el caso ERE para ocultar sus problemas internos a causa del caso Gürtel y el caso Bárcenas”. Lo que, según el secretario general de UGT Andalucía, explica que “desde el principio” se haya “exagerado la dimensión política y mediática del caso, que ha estado muy por encima de sus dimensiones reales”.

Para que no haya dudas, a renglón seguido, matiza: “Yo no quiero que haya un solo euro que se quede sin devolver, ni ninguna responsabilidad por esclarecer”, pero, afirma Pastrana, “de 25.000 personas que han pasado por el sistema, y que hoy no están en la exclusión social, hay ciento y pocos casos irregulares. Cuando comparas los casos, las dimensiones de cada uno son claramente distintas”. Pastrana concluye: “Lo que hace falta es que la instrucción culmine de una vez”.

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