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“Podemos ha sido sometido a un acoso mediático brutal”

Pedro Arrojo.

Óscar F. Civieta

Zaragoza —

Realizamos esta entrevista en la mañana del jueves 3 de diciembre. Solo unas horas antes de que la campaña comience de manera oficial. Y la hacemos en el mismo lugar en el Podemos dará en Zaragoza el pistoletazo de salida. Pedro Arrojo llega unos minutos tarde y, justo después de aparcar su bicicleta, pide perdón. Reconoce estar ilusionado, pero también nervioso. Sin grabadora nos dice que él nunca ha sido de estar en espacios de poder, pero que ha llegado el momento de hacerlo. 

Es un veterano de los movimientos sociales y políticos en Aragón. Sobradamente conocido en Zaragoza. Ha decidido dar el paso hacia la política más profesional porque hay que llevar “el espíritu del 15M y las mareas a la Moncloa. 

Ha colaborado con movimientos sociales, con PSOE, CHA e IU, ¿por qué dar el salto ahora a la política de una forma más profesional?

Hace mucho milité en el PTE. Aquel partido se disolvió y hubo mucha frustración. A muchos nos dejó un sentimiento no antipartido, pero sí muy crítico. Desde entonces he participado en movimientos sociales. Siempre pacifistas, en la línea de la no violencia. Al final acabé en la gestión de aguas y ahí se formó la Coordinadora de Afectados por Grandes Embalses y Trasvases (Coagret) y la Fundación Nueva Cultura del Agua. Cuando surge Podemos, varios amigos con trayectorias similares nos damos cuenta de que hay un movimiento emergente impresionante, de convergencia de mucha gente de diversos sectores. Y pensamos si no toca echar una mano desde la experiencia que tenemos en los movimientos sociales y en la política como res pública. Comprometernos de nuevo con este partido, que es más un movimiento político que un partido. Y ahí estamos, dimos el paso para llevar el espíritu del 15M, de las mareas a los parlamentos, a las Cortes, al Senado y, si es posible, a la Moncloa.

¿Ha recibido críticas de amigos, de gente cercana?

Propiamente no. En general ha habido una respuesta positiva. Compañeros que están en Izquierda Unida o en Chunta Aragonesista han mantenido una actitud no solo respetuosa sino también esperanzada. Yo les agradezco esa actitud, no he tenido críticas, que es posible que las haya aunque no me hayan llegado. De manera muy masiva he recibido apoyos esperanzados, de gente que no está en Podemos, pero que ve que este es un fenómeno muy vasto y diverso que genera una esperanza y expectativa de que la política partidaria y las instituciones puedan cambiar.

¿Es contradictorio que una fuerza política nueva, formada en gran medida por gente joven, apueste como cabeza de lista por una persona que lleva ya muchos años en esto?

Este es un movimiento que nace en las plazas, que nace en los jóvenes y son ellos los que nos devuelven la esperanza a los viejos rockeros, que no hemos abandonado la pelea, pero que estábamos ya en la desesperación de que nos muriéramos sin volver a ver la esperanza en la política. Los jóvenes infunden la osadía de la juventud en la política, la osadía de atreverse a cambiar. Yo vuelvo a creer en la política como el arte de hacer realidad lo necesario. Los que tenemos más experiencia tenemos la ventaja de la experiencia y la desventaja de no atrevernos a decir que el Rey está desnudo. Yo pienso y digo, ¿toda la izquierda, la que milita y la que no, no veíamos que el derecho a la vivienda está por encima del derecho al beneficio del banco? Claro que lo veíamos, ¿por qué no decíamos nada? Porque pensábamos que el banco era tan fuerte que era inútil decirlo. Pero los jóvenes si se atreven. Ven que es injusto, lo dicen y lo pelean. Eso es lo que me aportan ellos, ¿y qué podemos dar nosotros? Experiencia a la juventud, al impulso, a la osadía juvenil.

¿Qué es lo primero que haría por Aragón en el Congreso?

Cuando pienso en ir al Congreso por Aragón, lo primero que se me viene a la cabeza es la figura de Labordeta, más allá de las siglas. Ya eso es dejar un listón tan elevado que te genera mucho respeto. Además era un excelente y querido amigo. Yo el primer día, y durante un tiempo, voy a ser uno más. Y retomando un poco lo que supuso Labordeta, creo que desde Aragón podemos aportar varias cosas: primero la honestidad y la sinceridad, es un tópico, pero las partes positivas de los tópicos hay que tomarlas. Desde esta Comunidad debemos liderar de nuevo la política de aguas. La nueva cultura del agua ha nacido en Aragón y es algo que se reconoce internacionalmente. Los movimientos sociales que tienen que ver con el agua tienen su referencia en Aragón. Debemos ser los referentes estatales en el cambio de la política del agua. Espero retomar lo que dejó en marcha Cristina Narbona en su día, que yo pienso que fue nueva cultura del agua, hasta que, precisamente por eso, fue barrida del puesto que ocupaba. Y el otro gran terreno en el que yo me comprometo es en el desarrollo rural.

¿Cómo se evita el discurso del agua para todos que a Albert Rivera ya se le ha escapado?

No se le escapó, es su convicción. Lo cree desde una ignorancia que no se disculpa desde la juventud. Hay un debate que el debe conocer, y si no debería estudiar, que tuvo lugar en Bruselas, y hubo tres dictámenes europeos: uno económico en el que se concluía que ese trasvase suponía perder 3.000 millones de euros. Que tendría impactos ambientales que entraban en contradicción con la nueva legislación europea; y que era contradictorio con la aceptabilidad social que se requiere. No podemos hacer del trasvase el día de la marmota y volver a estar examinándonos de una asignatura en la que habíamos sacado sobresaliente. Eso me parece una irresponsabilidad clamorosa que espero que Rivera madure y entienda las cosas. En Podemos también hay un gran debate, pero ya tenemos un decálogo acordado entre los responsables de agua de Murcia, Valencia, Cataluña, Aragón y Castilla-La Mancha. Entramos ya en la contienda electoral desde una posición de coherencia en la que los trasvases quedan desechados de las políticas de futuro de la nueva política del agua.

¿Cree que Aragón ha sido maltratada en Madrid?

No ha sido maltratada, ha sido mal representada. Si a la gente le preguntas cuáles son tus diputados, salvo Labordeta, la gente no tiene ni idea, y eso ya lo dice todo.

¿No han hecho bien su trabajo?

Es que no sabemos qué han hecho. A lo mejor han hecho más de lo que parece, por eso no me atrevo a decir, pero si alguien hace lo que hace y sus representados no se enteran, es que lo está haciendo mal. Yo ya he dicho que todos los meses, yo y los diputados que salgamos de Podemos en Aragón, los primeros viernes de cada mes estaremos en al banco circular que hay en la plaza San Pedro Nolasco dando cuenta en plaza pública de lo que hemos hecho en Madrid. Los diputados de Podemos van a ser conocidos y reconocidos. Y asumiremos las consecuencias. Si alguien piensa que no lo hacemos bien, nos plantearemos procesos revocatorios.

¿En las Elecciones 20D les puede afectar el nombramiento a dedo de Julio Rodríguez o el no respetar las listas cremallera?Elecciones 20D

Puede que haya personas que nos dejen de votar por eso, pero estoy seguro de que habrá muchas más que nos voten por lo que que arrastra una figura como Julio. Desde el principio lo dije e hice una carta abierta: el mismo día que se supo la noticia empecé a recibir mensajes de compañeros queridos de IU o que vienen del movimiento pacifista; entonces esa misma mañana redacté una carta porque el tema de la cremallera me parece simbólicamente importante: desplazar a la segunda que era mujer era un tema que había que resolver, por eso propuse dentro del partido que si no salimos tres diputados, yo a mitad de legislatura cederé mi escaño a Esmeralda Gómez y seguiré trabajando en los temas que haya dejado arrancados. Ya el asunto del género queda así saldado. En cuanto al general, yo a él no le conocía, pero sí a otros militares demócratas de alta graduación, que son lo que queda de Unión Militar Democrática. Donde gente demócrata, muchos de ellos de izquierdas, se jugaban el cuello por un ejército profesional y democrático. Y lo hemos conseguido. Son demócratas convencidos y ellos mismos dicen que son militares antimilitaristas. Porque están en contra del militarismo como el ejercicio de la fuerza armada por generar poder.

¿Si se lo piden, enviará Rajoy tropas a Siria antes del 20D?

No, antes no. Son las típicas cosas que se embrollan, se dejen en formulaciones ambiguas, no se comprometerá a no enviar, pero tampoco a enviar. Jugará a la confusión, que es lo que ha hecho siempre, y luego si gobierna, colaborando con Ciudadanos en última instancia, pues viendo lo que dice Albert Rivera, de que él ya habría mandado allí a los soldados españoles heroicamente, pues podemos tener de nuevo un “No a la Guerra” con cientos de miles de personas en la calle.

¿Por qué cala tanto, al menos en las encuestas, el mensaje de Ciudadanos?

Lo han hecho muy bien. Es un operativo que se hace cuando ya Podemos empieza a acercarse a las fuerzas mayoritarias, y los grandes sectores económicos del Ibex 35, de la banca y demás, se activan para promover un partido joven neoliberal, limpio respecto al pasado de corrupción, y empiezan a apostar a dos cartas. Por un lado la del PP y otra la de Ciudadanos. Aquí es sabido cuando vino Albert Rivera antes de las últimas elecciones su reunión primera y principal, que fue en un restaurante público, fue con la élite de Telefónica y de los dueños de la prensa principal de aquí, diseñando la estrategia de Ciudadanos en Aragón. Lo han hecho bien para sus intereses. Han conseguido jugar con esa doble carta de PP y Ciudadanos. Acertó Pablo Iglesias en la expresión cuando advirtió a los ciudadanos de que tuvieran cuidado “porque una cosa es el cambio y otra el recambio”.

También según las encuestas, Podemos ha perdido fuelle. ¿La razón puede ser que Pablo Iglesias se haya echado para atrás en algunas de sus propuestas iniciales?

Yo creo que la bajada coincide con la llegada de Ciudadanos. En la expectativa de voto de Podemos había un proporción muy significativa de gente que había votado en otras elecciones a partidos de derechas y que ahora estaban profundamente indignados. Entonces nace Ciudadanos, a bombo y platillo, y sin ningún frente crítico de los medios de comunicación, que aplauden con las orejas, que les dan espacio, aire y posibilidades. Obviamente consiguen un buen porcentaje de esos votos enfadados, de componente más centrista. Además, Podemos ha sido sometido a un acoso mediático brutal. Yo, por ejemplo, escribía con frecuencia en un medio de prensa importante y en un momento determinado, antes de ser candidato, se me dijo que ahora estaba en Podemos y que habían recibido órdenes estrictas desde sus direcciones centrales porque a “Podemos había que pararlo”. Eso se me dijo a mí desde la dirección de un periódico. Y así ha sido. Luego me han publicado alguna cosa como si me hicieran un favor. Estamos en una sociedad donde los medios no mandan lo que hagan los ciudadanos en las urnas, pero sí lo condicionan. Y hay otra cosa que es que la sobrexposición pública desgasta, y Pablo Iglesias ha estado sobrexpuesto. De todas formas, se detecta un repunte en las últimas semanas y, como dice Iglesias, somos expertos en desmentir a las encuestas a última hora.

Como persona de la izquierda, ¿cree que se ha perdido una oportunidad muy buena de unir a toda la izquierda?

Creo que no hemos llegado a tiempo. Y la responsabilidad es de todos. Llevo diez años en las plataformas, empujando a que IU y CHA fueran juntos en su momento. Llegar a acuerdos políticos cuando llegan las elecciones es contradictorio: por un lado hay una demanda más presionante para que haya acuerdos, es una oportunidad, nos empuja la necesidad. Pero también, de alguna manera, se está disputando poder y eso dificulta. Cuando se llegó a discutir con una expectativa razonable de grandes alianzas se consiguió en Galicia, en Cataluña, en Valencia, en Huesca y aquí estuvimos a punto de conseguirlo y hubo al final una directriz central que lo impidió y no salió de Podemos. Pero da igual, no quiero echarle la culpa a nadie. Yo creo que no llegamos a tiempo. Creo que desde el día siguiente a las elecciones hay que retomar este asunto y que sea la última vez que vayamos separados. Así de claro. En la campaña no va a salir de mi boca ninguna crítica ni reproche, aunque pueda tenerlos, no los voy a sacar. No quiero entorpecer ni un ápice el proceso de convergencia.

¿Si vuelve a gobernar la derecha, será un fracaso de la izquierda?

Será un fracaso del país. Un país que se seguirá desgarrando económica y políticamente. Hace no mucho decía Errejón “si sigue gobernando la derecha se va a querer independizar hasta Valladolid”. Nunca nadie había hecho tantos independentistas catalanes en cuatro años como PP y Ciudadanos. Si siguen gobernando yo temo por la unidad de este país. Ese patriotismo de cartón que se lleva los dineros al extranjero.

¿Quién va a ser el próximo presidente del Gobierno?

Eso lo tiene que decidir la gente el 20D.

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