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Las carreteras de Huesca piden auxilio: conexiones fallidas, puntos negros y manifestaciones para reivindicar mejoras

Carretera entre Binaced y Valcarca

Miguel Barluenga

Huesca —

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Las carreteras altoaragonesas, vertebradoras a menudo de puntos alejados entre sí y que reclaman una mayor atención, son las vías abiertas por las que se desangran las posibilidades de crecimiento del territorio. Dos ejemplos son los de las conexiones de Binaced y Valcarca, en la comarca de La Litera, y de Aurín en el Alto Gállego, uno de los puntos negros habituales de los mapas de la Dirección General de Tráfico (DGT). Los vecinos de estas zonas reclaman mejoras y tratan de llegar a las más altas instancias.

Los vecinos de Binaced y Valcarca van a movilizarse a través de una plataforma, como ya lo han hecho en el pasado reciente localidades como Apiés, para reivindicar unas vías dignas pese a la constatación de que el Gobierno de Aragón no cuenta con ninguna partida presupuestaria a este respecto para 2018. Se ha denunciado, sin ir más lejos, la estrechez de la comunicación con Binéfar, que provoca que los camiones tengan que avisarse con la antelación suficiente para no coincidir en el mismo tramo.

Hasta el momento, se han debido conformar con parches y soluciones puntuales que no satisfacen a los vecinos pese a los apoyos de las localidades próximas como la propia Binéfar o Monzón, que acogen a muchos trabajadores de estas dos poblaciones y que han de realizar varios trayectos diarios entre todos estos puntos.

El departamento de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Ejecutivo autonómico ha estudiado las demandas del Ayuntamiento de Binaced-Valcarca sobre la mejora de sus accesos desde las vías de Monzón, Binéfar y Albalate de Cinca sin que haya podido comprometerse con el proyecto en lo que va de año. Se estudia la posibilidad de incorporarlo en otras anualidades pero sin fechas ni partidas confirmadas.

El Ayuntamiento lamenta que se esté “frenando el crecimiento de la localidad y pone en riesgo la vida de los que a diario usan las carreteras para entrar o salir del pueblo”, en palabras del alcalde, Juan Latre. Una situación agravada con las últimas lluvias, que dejaron impracticable la carretera de Valcarca, ya que el desborde del canal obligó a los conductores a darse la vuelta o a soportar esperas de más de 30 minutos.

La corporación se muestra muy crítica con el consejero José Luis Soro y se queja de que no cuenta con ningún acceso “en condiciones” para llegar a la autovía A-2 o a Binéfar Y Monzón, que se encuentran a menos de 10 kilómetros de distancia. La situación ha generado asimismo un incremento en el número de accidentes de circulación en los últimos años.

Los accesos son muy transitados por camiones de compañías como la Cooperativa San Marcos, que comercializa 20 millones de kilos de futa al año; Frucopasa, que cuenta con 520 camiones articulados; Reciclados del Cinca, con una producción de 25.000 cartuchos de tinta al mes, o Top Cable, que mueve 720 vehículos al año. Binaced considera que el estado de sus carreteras está frenando su crecimiento.

Por su parte, los vecinos de Aurín se unieron este fin de semana a la celebración del Día Mundial de las Víctimas de Accidentes de Tráfico y guardaron un minuto de silencio en el cruce de la N-330 recordando a las víctimas mortales y heridos en esta intersección. Siguen esperando a que se tomen medidas para mejorar la seguridad y, por ello, convocarán un nuevo corte el próximo 9 de diciembre.

Será la tercera ocasión en la que exijan que se tomen medidas para evitar el peligro que conlleva actualmente. Los vecinos llevan tiempo reivindicando la construcción de una rotonda, que está proyectada en la futura autovía, o la construcción de un paso elevado o soterrado. La Jefatura de Tráfico dio como posible solución la instalación de un radar fijo y más señales, pero por el momento no se ha llevado a cabo ninguna mejora.

Tras dirigirse a las instituciones, a la subdelegación del Gobierno y al Ayuntamiento de Sabiñánigo, no se conforman con los buenos gestos: “Nos dijeron que iban a incrementar la seguridad con la instalación de un radar y más señalización, pero aún no hay nada de esto. Así que volveremos a cortar la carretera del todo”, advierte el portavoz del colectivo vecinal, Fernando Tomás.

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