“La mayoría de las estudiantes jóvenes no detectan la discriminación. Pero existe, y mucho, a nivel profesional”
El proyecto 100 Mirrors fue seleccionado por la Comisión Europea como uno de los mejores proyectos Erasmus de la etapa 2011-2013. Ahora, llega a su fin el 100 Mirrors Extended, una segunda fase en la que INDICO actúa como promotor. Beatrice Bellet (Pau, Francia, 1969) es su responsable de Relaciones Públicas e Institucionales.
¿En qué consiste el proyecto europeo 100 Mirrors?100 Mirrors
100 Mirrors fue un primer proyecto encuadrado en el antiguo programa Erasmus, que recogió entre 2011 y 2013 cien reflejos de mujeres emprendedoras europeas. El promotor era la Universidad de Zaragoza, INDICO éramos coordinadores y participaban cinco países: además de España, Francia, Reino Unido, Grecia y Polonia. Ahora, el 100 Mirrors Extended es un nuevo proyecto dentro del programa Erasmus Plus, con INDICO como promotores, que entre 2014 y 2016 ha extendido el trabajo a cinco países más. El objetivo era que el resultado final contase con retratos de mujeres en diez idiomas distintos. En esta segunda fase, ha vuelto a participar España, que teníamos que recoger el testigo, volvimos a contar con Grecia, porque nos daba la oportunidad de tener una red internacional de mujeres, y se sumaron República Checa, Eslovenia, Países Bajos, Austria e Italia. También hemos actualizado las fichas de las mujeres del primer proyecto y, sobre todo, hemos extendido muchísimo la comunidad 100 Mirrors a través de un blog y de Facebook, con el objetivo de que la comunidad 100 Mirrors perdure en el tiempo.
¿Qué perfiles de mujeres aparecen en 100 Mirrors?100 Mirrors?
Para elegir a las 20 mujeres de cada país, los socios teníamos que hacer una selección bajo el criterio de abarcar cuantos más dominios de actividad, mejor. No queríamos reflejar solo el ámbito empresarial, sino también el social, el político, el artístico, el científico, el financiero, el educativo... Además, no buscábamos a la mejor emprendedora en cada sector, sino testimonios de mujeres referentes por haber llevado a cabo sus proyectos con muchas dificultades personales, profesionales o incluso económicas, pero gracias a sus cualidades y competencias transversales.
¿Piensan que hace falta todavía dar a conocer mejor el trabajo de todas estas mujeres?
Sí, totalmente. En internet es fácil encontrar rankings de mujeres empresarias o emprendedoras, pero nosotros jamás hemos recurrido a este tipo de listados porque teníamos claro que hace falta un abanico muy diverso y que una estudiante no puede mirar solamente a este tipo de mujeres porque muchas veces es una meta muy poco alcanzable. Las jóvenes no se ven reflejadas ni identificadas en estos modelos. Todo lo contrario, hemos buscado perfiles muy accesibles, algunos muy locales, que les hagan reflexionar sobre que hay que tener sueños y que todo el mundo puede alcanzarlos. Muchas veces se pregunta a estos Mirrors si han tenido ayuda de las instituciones, pero la mayoría responde que no, en absoluto, que no se necesita esa ayuda. El material que hemos elaborado en el proyecto viene bien a las jóvenes estudiantes que todavía tienen muchas dudas sobre su futuro profesional o incluso personal. Además, a través de los Mirrors, las estudiantes pueden contemplar la posibilidad de mentoring, de buscar la colaboración de las mujeres que ya tenemos una cierta edad y que podemos devolver a la sociedad lo que nos ha dado: tenemos la oportunidad de ser referentes para la nueva generación. Los Mirrors también son útiles para docentes y orientadores laborales, en clases prácticas sobre emprendimiento o incluso sobre el género. Un informe de la Universidad de Zaragoza de esta segunda fase del proyecto que refleja las necesidades de la mujer a la hora de emprender es de tanta calidad que ha sido recogido en varias bases de datos a nivel europeo.
¿Cree que mujeres y hombres tienen todavía más referentes masculinos que femeninos hoy en día?
Indudablemente. Los datos de ese informe de la Universidad hablan por sí mismos. Además, hoy en día, cuando hablamos del género a la mayoría de las estudiantes jóvenes, lo primero que dicen es que todos somos iguales, que no ven una discriminación real. No les ha dado tiempo todavía de verla, pero existe y mucho a nivel profesional. Los datos lo reflejan, sobre todo, no en el estrato de mando intermedio, sino en las juntas directivas. Estas últimas dos décadas se ha avanzado mucho, es cierto, pero aún queda muchísimo camino. En nuestro proyecto pensamos que este camino pasa por la formación, por que sea un tema, tanto el emprendimiento como el empoderamiento, que esté permanentemente en el aula dentro de los currícula. En la Universidad de Zaragoza, solo dos grados incluyen una materia sobre género e igualdad. Eso no es normal, todos los grados deberían tener una asignatura de este tipo
¿Qué es lo que más destaca en estos perfiles de mujeres?
Lo más destacado es la superación, la ilusión, la fuerza de voluntad... Muchas veces, a pesar de tener carreras universitarias, estas mujeres no han tenido nada fácil emprender en un ámbito de trabajo de hombres. No limitamos el concepto de “emprendedor” al de empresario. En las 200 mujeres que aparecen en los Mirrors, encuentras personas que no son empresarias, pero que sí han emprendido una asociación, un proyecto social, un proyecto artístico... Hay perfiles tan distintos como Paula Ortiz, Teresa Azcona, Alicia Asín, Pilar Andrade o Carla Antonelli. Lo que queremos enseñar a la joven estudiante no es solo la ficha de vida de estas personas, qué carrera han hecho, cuántos años tienen... sino también su camino para llegar a donde están. Queremos que se mezclen los aspectos estrictamente profesionales y de competencias con el aspecto de evidencia personal como mujer en el ámbito personal. En sus entrevistas, ellas hablan muchas veces de su familia, de sus parejas, de sus hijos... de cómo han hecho la conciliación familiar, si han tenido muchos problemas o todo lo contrario.
¿Las mujeres reflejadas en 100 Mirrors suelen decir que piensan que lo han tenido más difícil por el hecho de ser mujer?100 Mirrors
Hay un poco de todo. Algunas piensan que no, que han tenido un recorrido que solo lo han tenido ellas por ser mujer, que no lo habría tenido así un hombre, pero no lo ven como un camino más duro, sino totalmente distinto. Donde todas sí suelen coincidir es en el tema de la conciliación: en que a nivel profesional no han tenido un techo de cristal real, pero sí se han dado cuenta de unas dificultades de desarrollo mayor por el mero hecho de la conciliación familiar. Todavía, a pesar de todos los esfuerzos que se hacen, la carga familiar queda en los hombros de la mujer.
¿Hay algún aspecto o ámbito en el que las mujeres lo tengan más fácil?
Todas las profesiones que tienen que ver con el ámbito social o de comunicación forman un ámbito de poder femenino en la mayoría de los casos. Pero, de nuevo, a nivel de los técnicos, del desarrollo de los procesos. En las ejecutivas, no tanto; si subimos en la escala, van desapareciendo las mujeres. En las Pruebas de Acceso a la Universidad, hay muchísimas más chicas que chicos y son ellas las que recogen las mejores notas y las que tienen acceso a las empresas en primer lugar. Después es cuando aparece el efecto tijera: la situación se invierte totalmente y encuentras más hombres que mujeres en puestos de responsabilidad o cobrando un 30% más de sueldo. ¿Qué pasa ahí? Hay algo que hacer, algo no está funcionando.
¿Podría haber una tercera fase del 100 Mirrors?100 Mirrors?
Mucha gente nos anima. De momento, sí sabemos que habrá un 100 Mirrors Extended Inclusive, es decir, vamos a seguir trabajando en nuevos retratos de mujeres con discapacidad física, psíquica o incluso de inserción, como sería el caso del colectivo inmigrante. Este proyecto ya ha sido aprobado por la Comisión Europea, tenemos nuevos socios y la primera reunión será en Madrid el mes que viene. Por otra parte, queremos seguir siendo un referente desde Zaragoza a nivel nacional y europeo con el movimiento 100 Mirrors y el empoderamiento y el emprendimiento de la mujer en general. Por eso, vamos a recoger todos los resultados y los vamos a alojar en una plataforma que hemos creado con la Universidad de Zaragoza, que se llama “Generación Competyo”, y que busca trabajar en colaboración con instituciones, empresas privadas y la sociedad para desarrollo de competencias para la nueva generación, tan castigada por la crisis económica.
