El tinerfeñismo llora la pérdida de José María Negrillo

El CD Tenerife honra la memoria de José María Negrillo. El técnico andaluz, que falleció este pasado miércoles, dirigió al equipo blanquiazul en la temporada 74-75 y logró una meritoria permanencia en Segunda División. Con tal motivo los jugadores tinerfeñistas portaron luto este jueves en el Elche-Tenerife y el próximo domingo se guardará un minuto de silencio en la previa del Tenerife-Fuenlabrada, informa la entidad insular en su página web

José María Negrillo Stengl falleció este miércoles a los 85 años de edad. Nacido en Málaga, Negrillo tuvo una discreta trayectoria como futbolista, llegando a jugar en varios equipos del ámbito regional en Alemania, donde emigró a finales de los años sesenta en busca de trabajo. Allí se sacó el título de entrenador y recomendó al Sevilla el fichaje de Max Merkel, técnico austriaco de gran prestigio que había ganado la Bundesliga con el Munich 1860 y el Nuremberg.

Contratado en principio como intérprete, trabajó con Merkel como segundo entrenador durante dos temporadas en el Sevilla, con el que logró un tercer puesto pese a ser un recién ascendido. Y luego le acompañaría durante otros dos años en el Atlético de Madrid, con el que ganó la Copa del Generalísimo en 1972 y la Liga 72-73, pese a lo que el técnico austriaco abandonó España.

Seguidor de la férrea disciplina de su maestro, Negrillo debutó como primer entrenador con el Burgos 73-74, al que llegó mediada la temporada cuando los castellanos eran colistas y con los que logró la permanencia. Y al curso siguiente repitió experiencia en Tenerife: llegó al Heliodoro para suplir a Dagoberto Moll cuando los blanquiazules eran colistas y logró la permanencia.

En medio de una crisis que se había llevado por delante al presidente Cristóbal González Cano, el técnico andaluz fue contratado por una junta gestora que presidía Manuel Abreu con el visto bueno de los tres candidatos a dirigir la entidad, incluyendo al futuro presidente Colo Santaella. Y su presencia transformó a un equipo que había sumado ocho puntos en 14 jornadas.

Lo hizo, fundamentalmente, apelando a su solidez en el Heliodoro, donde logró diez victorias y un empate en los once partidos ligueros dirigidos por Negrillo en la Isla. Eso sí, la permanencia se selló gracias a una agónica victoria (1-2) en Cádiz en la jornada final, con un gol de Salvador en el último minuto que dejó al Tenerife 74-75 en la duodécima plaza.

Más allá de las estrictas normas de comportamiento que impuso a la plantilla y la intensidad de sus sesiones preparatorias, muy poco habituales entonces en el fútbol español, Negrillo también dejó su sello en el Tenerife por un curioso comentario tras ver por primera vez a su equipo en Huelva, donde perdió (1-0) ante el Recreativo, antes de hacerse cargo del banquillo blanquiazul.

“Lo que he visto en Huelva parecía un conjunto musical, no un equipo de fútbol. Hay que recortarse esas melenas”, dijo al observar las frondosas cabelleras que lucían en aquel tiempo los Jorge, Estévez, Pepito, Movilla, Salvador y compañía, muy acorde a los tiempos de conjuntos musicales como Los Diablos, Los Bravos, Los Sirex, Los Brincos y hasta Los Canarios que lideraba Teddy Bautista.

Y aunque no les tocó un pelo, lo cierto es que Negrillo les hizo reaccionar y logró que aquel Tenerife 74-75 se mantuviera en Segunda División.