Chomsky nuestro, que estás en la tierra por Pablo Rodríguez Valido

En estos días, conspicuos “conspiranoicos” seguidores del inefable Juanfer, han acusado al Gobierno de Canarias de querer implantar una dictadura. La causa de esta fantasía habrá que buscarla en la propia paranoia que ha dejado instalada en Canarias el dos veces ex ministro (¿dos veces? Mejor decir una, ex ministro de Justicia, y otra, ministro frustrado de Asuntos Exteriores). Paranoia que les hace creer que determinados medios de información están a punto de pasar a manos del enemigo.

Curiosa forma de entender la democracia: O sea, si los medios de comunicación los controlan los “conspiranoicos” del PSOE, entonces en Canarias hay democracia. Es decir, no importa que la información sea unidireccional, sesgada y sectaria si es que favorece al PSOE de Juanfer.

Pero la democracia deja de serlo desde que determinados medios de comunicación comienzan a darle un mínimo espacio a otros partidos no sometidos a la alianza coyuntural y oportunista que mantiene el PSOE con NC. Sin embargo, cuando esto ocurre en una comunidad autónoma donde gobiernan los socialistas (Cataluña, Andalucía?), entonces se pone en marcha el Consejo Ético de los Medios de Comunicación Social, que es algo así como “el Gran Hermano” que vela por todos nosotros. Y si es como en Canarias, que el PSOE no está en el gobierno autónomo por el sectarismo de Juanfer, entonces llaman dictadura a lo que sería una política de medios de información libres, desconcentrados y sobretodo, competitivos para que puedan ser imparciales.

Es más, en una reinterpretación de las tesis de Chomsky, si la causa es noble entonces no importa hacer contrainformación en los medios de comunicación. La prueba es la complicidad a la que ha llegado con ciertos periodistas que le entrevistan, donde ambos: entrevistado y entrevistador juegan a contrainformar de una manera pueril, refiriéndose a ATI cuando en realidad el referente es Coalición Canaria. Digo contrainformación pueril, porque si los dos: Juanfer y el entrevistador, hubieran leído a Chomsky, sabrían que para que esta técnica sea efectiva, el lector no deberá percibir el fraude. Si el lector lo descubre terminará por dejar de leer el supuesto medio que le manipula y le estafa.

Ante estos antecedentes, es de agradecer a Chomsky, que aún está en la Tierra, que dejara escritas sus reflexiones sobre el control de los medios de comunicación porque con independencia de su posición política, claramente de izquierdas; sus análisis constituyen un instrumentos de gestión para los que no deseando caer en la propaganda ni en la contrainformación, aspiran a un sistema de información libre; o lo que es lo mismo, desconcentrado, y en cuantas más manos mejor. Sé que esa aspiración es la que motiva al Gobierno de Canarias, aunque los amigos de Juanfer a ese procedimiento le llamen dictadura.

*Pablo Rodríguez Valido es presidente de Jóvenes de CC en Gran Canaria y miembro de la Ejecutiva Nacional de CC

Pablo Rodríguez Valido*