Espacio de opinión de Canarias Ahora
La encrucijada de la papa canaria por Pilar Rodríguez
Esto no es una novedad. El año pasado ocurrió exactamente lo mismo y las mismas voces autorizadas de entonces, que siguen siendo las de ahora, ponían sobre aviso a las instituciones y exigían soluciones.
El Secretario Insular de Coordinadora de Asociaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Miguel López, apunta que una, de tantas, soluciones que podrían evitar la entrada masiva de papas foránea en nuestra tierra, podría ser la aplicación de un arancel.
Dudo que legalmente esto pueda ser posible, dado que como miembro de la UE, acogidos al libre comercio y recibiendo ayudas compensatorias por nuestra lejanía e insularidad, este asunto pueda resultar viable. No obstante, Miguel López requería también un mayor esfuerzo institucional dirigido a las campañas publicitarias que incidan en el consumo local de nuestros productos. Propuesta que comparto plenamente, sin que ello sea la panacea. Pero bien es cierto, que teniendo una población de más de 2 millones de habitantes, más el aporte turístico a lo largo del año (en 2010, Tenerife recibió 1.730.000 visitantes), me lleva a pensar que la comercialización de nuestra papa puede tener salida.
Pero lejos de ir a planteamientos o soluciones románticas sobre el asunto, la realidad exige, sin lugar a dudas, un acuerdo inaplazable entre productores, distribuidores e importadores que pongan en valor a nuestro sector. Debemos ser conscientes de que nuestra capacidad competitiva en torno a los costes de producción es desventajosa pero los niveles de calidad de nuestro producto es de un alto valor añadido.
Considero que el único frente abierto que tiene el sector de la papa no es sólo la entrada de este tubérculo procedente de otros países a bajo coste sino, como señala Henry Sicilia, Presidente de la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (ASAGA), la falta de control de aquellas papas foráneas que se venden como producto local. Un asunto éste verdaderamente dañino y que requiere de controles de vigilancia e inspección por parte del Gobierno de Canarias.
Desde Europa son muchas las organizaciones de productores asociadas en torno a la defensa de la soberanía alimentaria de cada pueblo. En canarias tenemos un índice de dependencia alimentaria elevadísimo que se sitúa en un 80%. Por tanto, la búsqueda de soluciones no se puede hacer esperar más. El dumping que sufren nuestros agricultores es motivo más que suficiente para que Organizaciones Agrarias, Gobierno de Canarias, Gobiernos de los Cabildos Insulares, Distribución e Importadores se sienten en torno a una mesa en la búsqueda de soluciones urgentes.
Pilar RodrÃguez
Sobre este blog
Espacio de opinión de Canarias Ahora
0