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Final incomprensible
Se evidencia el resultado de un equipo que quiso y no pudo, son varios los años con idéntico final y van muriendo las ilusiones de unos aficionados. Es realmente triste. Para que ello ocurra hay que decir que las personas responsables de fichajes han cometido errores, el entrenador no ha sido el adecuado y el rendimiento de los jugadores tampoco. Equipos diseñados para intentar mantenerse en la segunda división, sin otra pretensión, lo han conseguido, pero otros, sin pensárselo han subido a Primera, en esta edición pasada del campeonato, tenemos la prueba. ¿Es importante para esta ciudad tener el equipo en Primera? Creo que sí. Puede ser un icono más para que sea identificada, para que sea valorada, para generar riqueza y empleo. Pero además a una parte importante de la población de la isla le generaría un estado de felicidad y de orgullo y posiblemente un acicate para que otros equipos de la región canaria lo consigan.
Nota: datos de la Federación; s/d: sin datos.
Con el análisis del presente cuadro se trata de llegar a conclusiones varias y entre ellas, valorar el rendimiento deportivo en razón al presupuesto, número de socios y resultado o posición alcanzada al final de la competición liguera. Hablando en términos deportivos y a la vista de los resultados, podríamos afirmar que su entrenador, señor Lobera, no logró un equipo con equilibrio en el campo en su etapa de entrenador.
En defensa, centro del campo y delantera. Tuvo en sus manos unos jugadores con un nivel técnico de primera magnitud, para competir en la liga adelante, pero no pudo o no supo, sacarle un rendimiento adecuado a esos jugadores. Se puede afirmar después de dos temporadas al frente del equipo que fracasó en el intento. Pero los que lo contrataron es evidente que se equivocaron. Se dejó en el camino infinidad de puntos con equipos de la mitad de la tabla hacia abajo, equipos técnicamente mediocres, pero con espíritu de lucha, sabiendo lo que podían y tenían que hacer en el campo dadas sus limitaciones. Esas actitudes y directrices las debe inculcar un entrenador. Pero no lo hizo, a las pruebas me remito y además parece que nadie le advirtió de ello. La valoración de Josico sería injusta y demasiado hizo para el tiempo que le dieron. Su valoración fue casi de éxito no logrado.
No deseo pronunciarme sobre los despropósitos vergonzosos del último partido ya que de ello se ha hablado, escrito, publicado y televisado, pronunciamientos, opiniones, juicios de valor, imágenes, para todos los gustos. Solo cabe reflexionar sobre lo ocurrido y adoptar medidas para que jamás vuelva a suceder. Pero sí que es el momento de diseñar una nueva campaña aprendiendo de los errores del pasado y de las actuaciones acertadas. Debería ficharse a un equipo técnico profesional que se compenetre con las características de los jugadores de la plantilla. No vale cualquier responsable deportivo por bueno que parezca y deseo que se acierte en la elección ya que en ella está buena parte del éxito del club.
En cuanto al presidente del club podríamos afirmar que en estos últimos años a parte de sanear a la Entidad, ha creado un estado de animo de ilusión a sus seguidores, ha defendido a sus dirigentes deportivos en los momentos más difíciles, ha creído en un proyecto deportivo y en sus objetivos. Equivocándose y tomando decisiones acertadas, no dejó sensaciones de apatías, ni de fracasos, evidenciando que es una persona competente para presidir la entidad. Esta defensa hacia su persona como dirigente deportivo, no está motivada porque le conozca, jamás he hablado con esa persona. Mi defensa está justificada como simple aficionado del equipo y en mi experiencia profesional en otros menesteres. Esperando y deseando en un futuro próximo que las decisiones que se adopten sean las adecuadas, las más acertadas para los intereses deportivos del club.
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