Otro hotel ilegal en Lanzarote

El último capítulo protagonizado por uno de los empresarios que según la voz popular “es el dueño de media isla de Lanzarote” lo conocimos ayer: el Tribunal Superior de Justicia de Canarias acaba de declarar nulas las licencias de construcción del Hotel Princesa Yaiza de Lanzarote. Después de salvarse de unos cuantos casos judiciales, Juan Francisco Rosa se enfrenta ahora a una sentencia judicial negativa. El consejero del cabildo de Lanzarote Carlos Espino cuenta perfectamente lo ocurrido en este hotel en un artículo que pueden leer en el CANARIAS AHORA. Cuenta Espino que en 1996 la promotora Kapell SA pidió licencia municipal para construir un hotel en Yaiza. El ayuntamiento gobernado por CC le denegó la licencia. Kapell era una empresa foránea. Alguien le dio el recado a Kapell de que la cosa sería más fácil si encontraba a un promotor que fuera amigo de CC. Y ahí apareció el amigo Juan Francisco Rosa, que logra una opción de compra de la parcela de Kapell. Al mes siguiente el alcalde de Yaiza José Francisco Reyes dicta un decreto revocando la denegación de la licencia y permite el mismo proyecto que había denegado seis meses antes. Rosa no debe tener amigos en la Sala de lo Contencioso del TSJC que acaba de declarar nulas de pleno derecho las licencias que otorgó el ayuntamiento de Yaiza. Las 660 camas del Hotel Princesa Yaiza son ilegales.

El anterior alcalde de Yaiza, José Francisco Reyes, y el exconsejero de Turismo Juan Carlos Becerra abandonaron Coalición Canaria y hoy son socios de Nueva Canarias. El pasado de estos personajes políticos echa por tierra todo el discurso de “separación de política y negocios” que suele abanderar Román Rodríguez.

Si Domingo Berriel y Rita Martín emplean para defender el hotel ilegal Princesa Yaiza la misma fuerza que utilizaron para defender los otros 22 hoteles ilegales de Lanzarote (que recibieron 33 millones de fondos europeos), entonces Juan Francisco Rosa puede quedarse tranquilo porque no tendrá que gastar dinero en abogados, su defensa la pagaremos con nuestros impuestos. Espero que por lo menos Rosa tenga el detalle de invitarnos a todos los contribuyentes al vino de la lujosa bodega que inauguró el año pasado en el primitivo barranco del obispo en La Geria. La empresa de Rosa obtuvo del gobierno canario la ayuda de más de 1 millón de euros en el año 2005 para construir una bodega gigantesca que ha cambiado el paisaje de La Geria. Mientras que las otras bodegas lanzaroteñas con muchos años de tradición recibieron en el mismo periodo 60.000 euros cada una. Así que todos deberíamos estar invitados al vino de Stravs en La Geria, sería un detalle con los ciudadanos que pagamos los sueldos de sus “amigos de Coalición Canaria”.

Juan García Luján