Prensa gratuita

Estuvo sembrado, el Llanos, en el pleno municipal que aprobó su moción. La ignorancia no sólo es atrevida sino además contagiosa, oye. Ignora CC-PP que la Prensa gratuita es hecho cotidiano en un porrón de importantes ciudades del mundo. Por si les sirve la fecha que lleva la carta, la vi por primera vez en Canadá, allá por los 80. En muchos sitios circulan varias cabeceras y se sabe ya que no afecta a la Prensa de pago, todo lo contrario, ni perjudica a los quiosqueros. Y como sabemos en Las Palmas de Gran Canaria, tampoco llena las calles de papeles. En cuanto al coste de la eliminación de sus residuos, Llanos se supera, por si eran todavía pocas las estupideces que largó.

Pero lo que realmente interesa, diría que literariamente, es ver en Ángel Llanos la caricatura de viejas actitudes caciquiles; aquellas reacciones inquietas por la aparición de medios fuera de control directo o menos susceptibles de ceder a las presiones de los mandarines. Son medios que dañan el prestigio de los buenos caciques por cuanto demuestran que, después de todo, pueden moverse piedras en su territorio sin pedirles permiso. No les inquietan tanto los contenidos concretos de cada edición como el temor a que, en cualquier momento, informen de lo que no les conviene; y no por el hecho informativo en sí sino por lo que les resta de autoridad ante la sociedad.

No es preciso, pues, que el medio desvele nada del otro jueves. Basta con que esté ahí y refleje opiniones ciudadanas fuera del guión oficial. Lo que tenga la iniciativa de Llanos de limitación de la libertad de expresión es sólo consecuencia de la obsesión por el control, por el dominio.

A este afán de dominio le vienen bien las dictaduras, que no se andan con requilorios. Pero en democracia se enmascara y pasa a menudo inadvertido a quienes no están en el día a día de este oficio. El ejercicio del dominio se hace más sutil y alienante; lo que no es talento que adorne el discurso de Ángel Llanos y de CC-PP y el de quienes, como don Pepito, ven la aparición en Santa Cruz de nuevos medios (no sólo de Metro) como ataque a lo suyo urdido por el enemigo exterior de Tenerife que utilizan de coartada.

Así es si así les parece.