¿De qué va ahora usted, Sr. Arenas?

O, para ser más exactos, y como declaró acertadamente el portavoz del PNV en el Ayuntamiento de San Sebastián, Xabir Ezeizabarrena, perpetrando “un auténtico chantaje fascista contra la libertad de prensa y de expresión”. Buscaron un objetivo emblemático para la sociedad vasca, cual es ETB y, por extensión, otros medios que están instalados en el edificio bilbaíno de la televisión autonómica.

Cauces democráticos

Sepa antes que nada esta gentuza -que asesina o amenaza en nombre de la libertad de Euskalerría- que no nos van a hacer callar. Respeto el derecho a defender lo que ellos definen como la libertad de Euskalerría. Pero esa aspiración territorial no merece ni una sola gota de sangre. ¡Ni una, canallas! Aprendan de ERC y de otros partidos independentistas que utilizan los cauces democráticos y repudian la violencia y el terror como método para hacer política.

Abyecto currículo

A lo largo de su abyecto currículo, los etarras han matado a varios colegas y han tratado de amedrentar a otros. Todos los totalitarismos ?y ETA encarna de hecho el fascismo nacionalista- actúan de forma similar frente a los medios de comunicación. Los amordazan. Persiguen a los periodistas. Les gusta fundamentalmente el silencio de los cementerios. Pero ETA así no consigue nada en favor de sus siniestros intereses.

Todo lo contrario

Todo lo contrario. Sólo logran que se incremente la repulsa colectiva que generan los criminales. Ningún periodista español y/o vasco ?del color que sea, salvo los afines a ETA, que son por fortuna minoría- es complaciente con la banda terrorista. Coincidimos todos en condenar a los que matan, aunque luego debatamos con ardor respecto a cuestiones que, siendo importantes, no dejan de ser -en sentido estricto- colaterales.

Presunto moderado

Recuperemos las manifestaciones de Arenas. Este presunto moderado ?que se unció hace un año al carro de Mariano Rajoy, o sea, al carro del vencedor, ¡ay!, provisional- ha dejado al líder de su partido con el culo al aire, sea leída esta expresión en tono coloquial, claro. Mientras Rajoy hacía otra vez de bueno de la película, respaldando al Gobierno y subrayando la unidad de los demócratas frente a ETA, Arenas se puso la careta de Ángel Acebes o la de Eduardo Zaplana y regresó a las barbaries dialécticas, de un antaño reciente, contra Zapatero.

Con entusiasmo

Arenas, que aplaudió con las orejas del entusiasmo, la tregua de ETA -y las expectativas de diálogo, negociación y paz- con José María Aznar en La Moncloa, comentó el atentado a ETB exigiendo a José Luís Rodríguez Zapatero que diga que “nunca jamás habrá una expectativa de negociación con los terroristas” y que tambien diga “de una vez por todas que su objetivo es la derrota de ETA, no que desaparezca”.

Gastada chistera

¿Pero hombre, Sr. Arenas, de qué va ahora usted? ¿Cómo puede soltar tanta demagogia en tan pocas palabras? ¿Qué conejo se ha sacado de su gastada chistera de sofista tratando de contraponer “la derrota de ETA” a que la banda terrorista desapareciera. ¿Enojaría al conjunto de los ciudadanos españoles que un día de éstos ETA desapareciera? Más bien habría una inmensa alegría si ETA hiciera para siempre mutis por el foro. ¿No se da cuenta que estos estúpidos bizantinismos única y exclusivamente sirven para desacreditar al presidente legal y legítimo del Gobierno de España, como si Zapatero no estuviera cumpliendo con su deber?

Ni vencedores ni vencidos

¿Por qué no abrió la boca, Sr. Arenas, por cierto, cuando el secretario de Estado de Seguridad del Ministerio de Interior, Martí Fluxá ?uno de los representantes del Gobierno Aznar en los contactos con ETA-, dijo que, si acababa el terror, no debiera haber ni vencedores ni vencidos? ¿Se acuerda? Es una lástima que no se acuerde y, mientras, recurra al juego sucio para atacar al Gobierno. Parecen ustedes un disco rayado.

Sin argumentos

Se han quedado en el PP sin argumentos. Esa es políticamente su desgracia. Hasta han agotado ya todas sus ocurrencias sobre la crisis. Zapatero no cedió ni una coma en el proceso de paz, quebrado por ETA hoy hace exactamente dos años, al destruir la T-4 y matar a dos ciudadanos. Zapatero no ha sido jamás amigo de ETA ni ha traicionado a las víctimas o a los muertos. ETA está contra las cuerdas. Sus matones van a la cárcel constantemente. Han caído comandos y han caído los jefes de ETA. Eso es verdad, aunque eso rompa su guión de campaña, Sr. Arenas.

*Enric Sopena es director de El Plural

Enric Sopena*