Salmones, mentiras y cintas de vídeo

La versión canario-nórdica de la película de Soderbergh podría titularse “Salmón, mentiras y cintas de vídeo”. Mantenemos la ausencia de escrúpulos del protagonista y cambiamos sexo por salmón porque el sexo es un asunto privado, pero la pesca patrocinada, las mentiras en sede judicial y el vídeo de un pleno del Parlamento son todos asuntos públicos. Este periódico de ustedes publicó ayer un vídeo de la votación parlamentaria el 30 de marzo de 2007 de las excepcionales 5496 licencias turísticas nuevas. Había varios informes técnicos que advertían de las dudas legales de algunos de esos proyectos, como el de Anfi Tauro, pero en Bananaria es posible (no sé si legal) que una ley de Directrices aprobada por unanimidad sea pisoteada por menos de la mitad de los diputados autonómicos (29) que, según vemos en el vídeo, se levantaron en posición de firmes para mostrar su entusiasmo por la victoria del cemento y el césped agujereado frente a la protección del territorio.

En el vídeo se comprueba la presencia de PP Manolo Soria en esa esquina principal frente al presidente del gobierno donde él se había colocado desde que apoyó la investidura de Adán Martín. Era el sitio habitual del portavoz de la oposición, pero PP Manolo pidió que lo sentaran ahí para salir mejor en la televisión. Y, fitetú, que ese obsesivo deseo de salir por la tele lo deja ahora en evidencia y es el personaje más presente del vídeo de la votación de la multiplicación de las camas (de la multiplicación de los salmones no hay vídeo porque, según la versión de el Humilde, en el pueblo de las vacaciones noruegas no había cajeros automáticos ni cámaras de televisión). El vídeo desmiente las declaraciones de Soria en el Tribunal Superior de Justicia de Canarias. En el acta de esa declaración se recoge la pregunta del fiscal Anticorrupción sobre Anfi Tauro: “P(pregunta) si cuando se debatió esta cuestión, Anfi Tauro, en el Parlamento el declarante participó en dicha sesión. Responde que no, y que no sabe si asistió el señor Fernández, aunque éste le ha dicho que no”. Pero el vídeo prueba que PP Manolo participó en el momento más importante del debate: la votación de ese proyecto sobre el que le habíapreguntado el fiscal Anticorrupción.

La misma semana que conocemos que nos acercamos a los 200.000 desempleados tenemos a un consejero de Economia dedicando su jornada laboral a preparar un comunicado de prensa para defender su imagen y desmentir las evidencias. La Provincia y CANARIAS AHORA publicaron el vídeo y contaron que Soria había mentido a la jueza. PP Manolo el Humilde reaccionó enviando un comunicado a La Provincia y mandando la noticia de CANARIAS AHORA a sus abogados, nuestro hombre quiere que García-Alcalde (¡qué decepción Guillermo, qué decepción!) rectifique y Carlos Sosa vaya a la cárcel. Y lo mejorcito es el titular del comunicado de prensa “Soria demuestra documentalmente que dijo la verdad a la jueza” y esa demostración documental se basa en el acta judicial que emplearon los periódicos para sus informaciones. Dice Soria que él no estuvo en la Comisión de Ordenación del Territorio donde se debatió ese tema, ¡claro, no hacía falta, a lo mejor estaba el diputado Manolo Fernández que para eso cobra 12.000 eurillos del Grupo Anfi por defender sus inteses con exclusividad y alevosía! Digo a lo mejor porque si Soria duda de la palabra de Fernández yo más.Así que el declarante fue muy estricto con la pregunta y dijo que no estuvo en la sesión del debate, porque para Soria la votación que se realiza al final de un debate ya no forma parte del debate.

Sube el paro en Canarias mientras el consejero de Economía dedica unos días a preparar sus respuestas a la jueza y al fiscal Anticorrupción, otros días a declarar en juicios contra periodistas o denunciantes de casos de corrupción, otros días a desmentir un vídeo del Parlamento. Mientras esto ocurría en Canarias, en Madrid el presidente Paulino Rivero daba una rueda de prensa donde se veía obligado ¿? a defender la presunta inocencia de su vicepresidente, pero dijo que no sabía si Soria mintió ante la jueza porque él, Paulino I, no estaba en el TSJC el día que conocimos a Irina. Ya te lo dije el otro día, Secundino, ¡qué malita está la patria!

Juan García Luján