Verdades como puños

Dice Ana Oramas que ella “defiende a Canarias” diciendo “verdades como puños”. Pero lo cierto es que el pasado martes Oramas se perdió entre realidades paralelas, lealtades y deslealtades con el único fin de salvaguardar sus intereses. Oramas no defendió los intereses ni de su secretario general, José Miguel Barragán, ni los de Coalición Canaria, ni mucho menos de las canarias y los canarios. 

Poco a poco, durante la semana pasada, se iban descubriendo los votos de los partidos representados en el Congreso para la investidura de Pedro Sánchez. A última hora bailaban el Bloque Nacionalista Gallego (BNG) y Coalición Canaria. Nueva Canarias había decidido rápido desmarcarse de Coalición e ir por libre y se especulaba con la posibilidad de que CC se abstuviera, parecía que no les quedaba otro camino.

Primero salió Barragán para comunicar que el partido había decidido abstenerse en la votación y dar “margen” a Pedro Sánchez, sin embargo, al día siguiente, Ana Oramas se saltaba lo que había dicho en rueda de prensa Barragán y comunicaba que votaría que NO a la investidura de Pedro Sánchez. El partido la advirtió con tomar medidas contra ella, que en el peor de los casos se podría traducir con la expulsión, pero ella firme a sus intereses votó “no”. 

Y es que, un gobierno que tiene de apoyo a Podemos no puede estar apoyado por Coalición Canaria, y mucho menos por Ana Oramas. Pero, lo que es una ‘verdad como un puño’ es que el plan estratégico de Ana Oramas es redondo, siendo consciente de que la marca ‘Oramas’ ha superado a la del partido sabe que ahora mismo es ‘intocable’. Las posibilidades de la expulsión son bajas, y si las expulsan ha asegurado que seguirá siendo diputada. En el caso contrario, si la jugada le sale mal, la diputada nacionalista expresa su apoyo a Fernando Clavijo para el Congreso que tienen previsto en mayo, en el que Clavijo podría disputarle la secretaría general a Barragán. 

No hay nadie dentro de Coalición Canaria que tenga la capacidad de convencer que tiene Oramas, y, por eso, en el partido están aplaudiendo la decisión tomada. Para los nacionalistas es “valentía”. Le decía José Alberto Delgado, exalcalde de La Laguna, a David Cuesta en MírameTV que “estaba seguro” de que ni Fernando Clavijo ni Barragán conocían la decisión de Oramas a pesar de que ambos viajaron a Madrid para apoyarla, suena extraño. 

Siendo conscientes o no, lo cierto es que Oramas ha ignorado de forma reiterada las indicaciones de su partido y de su secretario general públicamente. Es inevitable acordarse a lo que decían los dirigentes de Coalición Canaria cuando Matilde Zambudio, Lazcano y Enrique Arriaga votaron en contra de las directrices de Ciudadanos mano. Los mismo que defienden la “valentía” de Oramas no son capaces de argumentar las razones por las que el caso de Zambudio es de “traición y deslealtad” hacia su partido y el de Oramas es un caso de ‘valentía y coraje’.