De veletas y miserables

Casado y Rivera se pusieron tan pesados exigiendo a Pedro Sánchez que convocara elecciones que al final no tuvo más remedio que hacerlo, aunque no solo por esa petición sino porque los partidos de los aludidos rechazaron junto a los independentistas catalanes y Bildu los presupuestos generales del Estado que presentó Montero, que no Montoro, su predecesor.

Nunca agradecerá lo bastante Pedro Sánchez la insistencia de los líderes de la derecha española para que convocara elecciones anticipadas y de paso lograr 123 diputados.

Rivera puso un cordón sanitario al PSOE antes de las elecciones y ahora insiste en no pactar con los socialistas a pesar de que Pablo Casado, un tanto cínicamente, lo ha invitado a hacerlo. Al fin y al cabo ya lo hizo antes. Rivera juega a que el PSOE solo pueda pactar con Unidas Podemos y los nacionalistas e independentistas, y no con él, para luego culpar a Sánchez de tirarse a los brazos de “los populistas, los traidores separatistas que rompen España y los amigos de los terroristas”. Una estrategia bastante miserable.

Tanto el PP como Ciudadanos exigieron al PSOE de Pedro Sánchez que se abstuviese para que Rajoy fuese investido presidente la última vez. Sin embargo, ni uno ni otro quieren facilitar ahora la investidura al socialista, a pesar de que los argumentos son los mismos: la estabilidad de la Nación. Se ve que PP y Ciudadanos solo ven inestable al país cuando gobierna la derecha sin mayoría absoluta.

Por estos giros de Rivera, Vox llama a Ciudadanos el partido veleta. Los lunes, miércoles y viernes es de derechas y los martes jueves y sábados de izquierdas. Los domingos son de centro, donde dicen que está la virtud, después de ir a misa de 12 y tomarse el vermú con aceitunas de aperitivo.

En eso se parece Ciudadanos a Coalición Canaria: siempre dando bandazos. Mientras Ana Oramas y Fernando Clavijo han advertido que no negociarán con Pedro Sánchez si pacta con Pablo Iglesias, su correligionario en Gran Canaria José Miguel Bravo de Laguna asegura que no descarta a nadie en un futuro pacto.

Mientras todo eso ocurre, el pasado sábado la Televisión Canaria informó generosamente de la presentación de los candidatos de Coalición Canaria en el informativo que se emitió en el descanso del derbi entre el Club Deportivo Tenerife y La Unión Deportiva Las Palmas.

Debió ser casualidad que Coalición Canaria eligiera esa tarde de gran audiencia televisiva para presentar con pompa y boato a sus candidatos: Nardi Barrios, Bravo de Laguna, Pablo Rodríguez y Fernando Clavijo.

Tras la victoria pírrica de los tinerfeños, el tiro puede salirle por la culata en Gran Canaria, que es la isla donde tiene menos apoyos de todo el archipiélago, porque los aficionados amarillos asociarán las imágenes de los candidatos con la derrota de la UD Las Palmas.

En Tenerife ocurrirá lo contrario pero esta isla necesita menos promoción porque CC suele conseguir mejores resultados. Tanto en política como en fútbol, a veces se gana perdiendo y se pierde ganando. Ya veremos qué pasa el 26 de mayo.