Confirmadas las prisas moganeras que hace un par de días les contábamos aquí mismo cuando relatábamos el frenesí que se produjo este viernes en ese pedazo de Ayuntamiento para tramitar este miércoles la aprobación inicial del plan parcial de Veneguera. Sólo que no nos esperábamos esta extravagancia con la que han salido para demostrar que existen los reinos de taifas en un Estado de derecho y que eso de la Administración única es un espejismo. No es que quieran en el Ayuntamiento ahorrar dinero a las Administraciones públicas, ni preservar el interés general, ni evitar cualquier tipo de inseguridad jurídica. No. De lo que se trata, en definitiva, es de cobrar al Gobierno 30 millones de euros, en concepto de licencia cesante, con los que tapar unos agujerillos de nada, según ha dicho el concejal de Turismo, Sebastián Hernández. No cuenta el concejal que con esta aprobación inicial lo que se produce es el inicio de los plazos correspondientes que marca la ley para aprobaciones y hasta posibles subrogaciones por parte, por ejemplo, de la Cotmac. Es decir, si hasta este miércoles estará en manos del Ayuntamiento de Mogán cualquier decisión sobre Veneguera, con la aprobación inicial del plan parcial valen hasta los silencios administrativos en otras instancias, y ya se sabe que en esta tierra tan singular, cuando un expediente pasa por tantas manos, pueden producirse fenómenos paranormales y muy sobrecogedores.