Lo de este domingo en los periódico en referencia a la UD rozó la sobredosis. La agencia Efe se hizo eco de unas sustanciosas declaraciones del presidente del club, Luis González, poniendo a Manuel García Navarro más bonito que un San Luis. No es mentira que la gestión de García Navarro y de otros compañeros de SAD fue desastrosa, y basta con mirar los números. La diferencia con la actual gestión es que García Navarro y sus compañeros se jugaban sus propias perras, y los gestores de la UD se juegan las perras de García Navarro y sus compañeros. Suena a marciano, pero es así: el gestor de los dineros de los socios pone a caer de un burro a uno de los principales propietarios de los dineros. Lo que nos lleva a confirmar una cosa y a sospechar otra. La confirmación es que Angulo le ha dado garantías plenas de que no pasa nada y los asesores legales le han confirmado que a lo más que puede llegar es a una junta de accionistas. La sospecha es que García Navarro no está del todo acompañado. Pero no hay prisa, ambas cosas las confirmaremos más pronto que tarde. El resto de la dosis vino dada por una jugosa entrevista que le hizo La Provincia a Manolo Torres, que aparece retratado en una esquina de su despacho con la lupa, los grabados y los bustos de su héroe favorito, Sherlock Holmes. Torres confirma la autoría de cada una de las acciones de catarsis que ha ejecutado, pero nos aporta dos novedades muy interesantes. La primera, que es admirador de Gonzalo Angulo en lo deportivo ¡y en lo cultural!, y la otra que ya ha hecho las paces con el consejo de administración, al que en una ocasión llegó a decirle que las instrucciones que él ejecutaba no eran las de ese órgano de dirección. Elemental, querido Towers.