Al otro extremo de la búsqueda diligente de la verdad y la información contrastada se sitúa la otra noticia judicial que hoy les acercamos. El juez de Instrucción 3 de Las Palmas de Gran Canaria, Tomás Martín, ha decretado el sobreseimiento libre y el archivo de la querella que en 2007, repetimos, en 2007, interpuso contra CANARIAS AHORA el portavoz económico del PP en el Parlamento de Canarias, Jorge Rodríguez Pérez. No es la primera vez que este magistrado archiva estas majaderías de su señoría Pérez, pero en una pirueta muy habitual de la Sección Sexta de la Audiencia Provincial, se vio obligado a reabrirla para tomar declaración a un testigo más e imputar a otro periodista más a ver si así sonaba la flauta y nos podían coger en un renuncio. Fuchi Maruchi, que se dice. Su gozo en un pozo, pronunciado en el argot de esa sección. Porque tras la práctica de esas pruebas, el juez ha concluido nuevamente que todo lo que CANARIAS AHORA publicó acerca de Jorge Rodríguez y su directísima implicación en la trama de Grupo Europa, introduciendo a esa empresa en los ayuntamientos gobernados por el PP a cambio del cobro de comisiones cuando ejercía de diputado en la legislatura 2003-2007, no sólo era verdad entonces, sino que es la cuestión que lo llevará en breve al banquillo del TSJC en el primer juicio por el caso Faycan. A lo largo de diez folios, el juez valora la veracidad de las informaciones: “El informador”, se puede leer en el auto, “actuó con la diligencia constitucionalmente exigible y, en consecuencia, queda amparada su actuación por su derecho a la información”. Por lo tanto, se sobreseen las diligencias y se archiva la causa por no existir delito alguno. Seis años imputados dos periodistas de esta casa y su director por una denuncia claramente maliciosa (por no decir que falsa), porque si alguien sabía a ciencia cierta cómo había actuado y las cochinadas que había cometido, ese era Jorge Rodríguez, que sin embargo tuvo los arrestos de querellarse a ver si colaba y nos provocaba algún tipo de daño. Ahora le toca a él responder en el banquillo de los acusados por los cargos que contra él pesan y por la condena a prisión que pide el fiscal anticorrupción. Buen provecho, señoría.