La UD refrenda sus buenas sensaciones
Sigue acumulando minutos y victorias el proyecto amarillo. Tres preparatorios, otros tantos triunfos. Este domingo, con un rival de mayor categoría, el Vecindario, la UD Las Palmas repitió el resultado de Tijarafe, tal y como recoge la página web de la entidad amarilla. Vicente Gómez y Dani Carril se estrenaron como goleadores. La mala noticia, la lesión de Pignol en la primera mitad.
La UD Las Palmas comenzó a evidenciar muestras de un equipo más hecho, con un fútbol más ordenado tanto en ataque como en defensa. Incluso con un rival de mayor entidad que los anteriores, los amarillos ofrecieron un juego que durante fases del partido resultó muy vistoso y que arrancó los primeros aplausos de la parroquia que se congregó en Maspalomas.
Vitolo fue un puñal en la banda izquierda. El joven futbolista amarillo fue quien primero desató las hostilidades. Una galopada suya por el carril zurdo, con mucha potencia, desbordó a su par y, sobre la línea de cal, centró con potencia. En su intento de despeje, Erik envió al fondo de sus propias mallas. Apenas se llevaban ocho minutos disputados.
Dos minutos más tarde el mismo Vitolo pudo aumentar la cuenta. Se quedó solo ante Santi, pero quiso rizar el riso y la vaselina que tiró no fue lo suficientemente alta para superar al guardameta blanquinegro. Por ese entonces, se gustaban los amarillos. Jonathan Viera se sumó a la fiesta con su ex compañero de filial, para combinar a la perfección para la tercera ocasión de la Unión Deportiva en un tiro raso que detuvo el portero.
Un minuto después llegó la cuarta ocasión. Fue una jugada que nació en las botas de David González y alcanzó la posición de Guerrero, en carrera pero algo escorado, y su vaselina pasó por encima del larguero. Hubiera sido un gol precioso.
Erik se desquita, Viera vuelve a marcar
Aunque la UD Las Palmas merecía más, fue el Vecindario el que igualó la contienda. En un saque de esquina, un despeje de la zaga amarilla cayó en las botas de Erik al borde del área, que envió alto, buscando la escuadra, sin que un Barbosa inédito pudiera hacer nada para alcanzar el remate. Además, se acumulaban las malas noticias para los amarillos con la lesión de Pignol, que le obligó a retirarse del terreno de juego en esa acción.
Antes del descanso volvería a adelantarse el conjunto de Paco Jémez con una nueva jugada que nació por la izquierda. Vitolo y Jonathan Viera volvieron a fabricar tiralíneas para que el balón llegara a las inmediaciones del área en poder del primero. Éste lanzó un centro muy fuerte al segundo palo, donde llegó Sergio Suárez, algo escorado, y cabecear atrás con una precisa asistencia a Jonathan Viera que, a placer, mandó al fondo de la red con la portería vacía en su segundo tanto de la pretemporada.
El Vecindario comenzó la segunda parte con mayor presencia en ataque, al menos en los primeros minutos, y lo intentó con algún disparo lejano. Pero con el avance del encuentro, la UD Las Palmas volvió a imponer su ritmo y fue trenzando más juego en ataque. Armiche gozó de la primera gran ocasión de esta reanudación con una jugada en la que penetró por el costado zurdo y disparó desviado al lateral de la red defendida por Lampón.
Vicente y Carril sentencian el partido
Faltaba ese último pase, ese último remate... Así fue hasta el minuto 70. Un gran envío de Saúl al primer toque en tres cuartos habilitó a Vicente Gómez diáfano, solo ante Lampón, al que batió con un disparo cruzado subiendo el 3-1 en el marcador. El gol del joven canterano es un premio a tres buenas actuaciones en tres partidos de pretemporada.
Con el partido definido, la UD Las Palmas jugó a merced del marcador. Armiche fue el más incisivo en el costado izquierdo. Se mostró activo y con ganas, aunque no tuvo esa gran ocasión. En el tramo final del encuentro, los amarillos recibieron una de cal y una de arena. Guayre, algo sobrecargado en la zona de isquiotibiales, prefirió no arriesgar y no acabó el partido. Guerrero volvió a saltar al campo. Y la buena noticia, el cuarto gol, para un debutante: Carril cabeceó a placer un saque de esquina para sentenciar el resultado.
