Cabo: “Estamos contentos de volver a ser civiles, como el resto de los españoles”
MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El portavoz de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), César Cabo, que están “contentos” de que, “por fin”, después de “semanas de anomalía” en las que los trabajadores del colectivo fueron militarizados por el caos aéreo vivido el 3 de diciembre, mañana recuperarán su condición de “civiles como el resto de españoles” al levantarse el estado de alarma decretado por el Gobierno y recalcó que “la normalidad” continuará en los aeropuertos del país.
En declaraciones a Europa Press Televisión, Cabo recalcó que mañana a las 24 horas recuperarán la normalidad como trabajadores, ya que no tendrán la presencia de los militares en sus centros de trabajo, si bien aclaró que no supondrá “nada” para el desempeño de su labor en las torres de control, ya que actualmente operaban “con normalidad”, por lo que insistió en que la prórroga del estado de alarma fue “innecesaria”.
Así, recordó que fue AENA quien “cerró el espacio aéreo” y reprochó que, en lugar de buscar soluciones y encontrar a controladores disponibles para solventar las bajas que se dieron el 3 de diciembre, “prefirió aumentar el caos y demonizar al colectivo”. “El Gobierno tenía un plan establecido y no se paró a pensar en el usuario ni en los controladores”, apostilló.
Sobre el trato recibido por parte de los militares, Cabo comentó que su trato ha sido “exquisito” siendo en todo momento “muy comprensivos” con los trabajadores y añadió que no han echado en falta a los “gestores de AENA” durante este tiempo de estado de alarma.
NEGOCIACIONES CON AENA
El portavoz de USCA confió en que las negociaciones que se han retomado con AENA después del caos aéreo lleguen a un “segundo convenio colectivo” que resuelva los problemas del sector antes del 31 de enero, fecha en la que si no se llega a un acuerdo entraría en funcionamiento el arbitraje, tal y como han acordado ambas partes.
Aunque ya hay resueltos muchos de los temas pendientes, “el grueso”, sobre la “jornada laboral y la distribución de la carga horaria” todavía no se tiene acuerdo ya que, según explicó, el proceso de privatización de AENA lo “hace muy difícil” por la “falta de transparencia” de la gestora.
Así, y tras exponer que “no hay ningún tipo de discusión” sobre el salario que pasarán a cobrar, sostuvo que “lo más razonable” sería una carga horaria como la de “la media europea”, que gira entorno a las “1.400 horas” y no las 1.760 horas que actualmente la Ley de Navegación Aérea española les obliga a trabajar.
Si no se llega a un acuerdo antes de final de mes, Cabo reconoció que sería “un fracaso” para la resolución del conflicto laboral e indicó que si entra el árbitro en la negociación, el ex ministro de Trabajo Manuel Pimentel, “no habría ningún problema” ya que es, según dijo, es un “excelente profesional” en las relaciones laborales.
