La valoración de la matriz de Bankia se conocerá tras el informe de las consultoras
MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
La valoración de Banco Financiero y de Ahorros (BFA) para determinar la participación del Estado en el capital de su filial cotizada Bankia se conocerá después del 21 de junio, fecha en que el Banco de España debe recibir la evaluación de la banca española por parte de las consultoras Oliver Wyman y Roland Berger, informaron a Europa Press en fuentes financieras.
Bankia contará con asistencia estatal por importe global de 23.465 millones de euros, de los que 4.465 millones serán la transformación en capital de un préstamo por este importe concedido en 2010 por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) para su constitución.
Para determinar el porcentaje del capital público en el accionariado de BFA y de su filial, la entidad designó al auditor Ernst & Young para hacer una 'due diligende' del plan de negocio y ver qué representan los 4.465 millones de euros en relación con el total de la masa de capital de la matriz.
Ernst & Young ya ha remitido su informe al FROB, y a partir de ahora, los valoradores independientes designados por este organismo: HSBC, Credit Agricole y Rotschild procederán a hacer una valoración económica que servirá de base para transformar en acciones dicho préstamo concedido en forma de participaciones preferentes.
Cada una de estas tres firmas internacionales realizará una valoración propia y se hará el promedio de todas para determinar el valor que se asignará a los títulos. En caso de que alguna de ellas supere al promedio en más de un cierto valor, se desechará.
Con la transformación del préstamo del FROB en capital se hará efectiva la nacionalización de la práctica totalidad del BFA y de un porcentaje cercano al 50% de Bankia, según los cálculos que maneja el Ministerio de Economía a falta de conocer dichas valoraciones.
La entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri ha solicitado el mayor importe de recursos públicos para garantizar su solvencia y viabilidad futura de la historia de España, debido, fundamentalmente, a su elevada exposición al 'ladrillo' y al deterioro de su cartera de participadas.
