Cuatro fórmulas para que los canarios promuevan las renovables

El cambio climático y la mayor sensibilización social respecto a la contaminación derivada de la generación de energía ha hecho proliferar en España la implantación de renovables, con más o menos tabas por parte de las administraciones públicas y de las multinacionales interesadas.

En Canarias, el rechazo frontal a las prospecciones petrolíferas llevadas a cabo por Repsol generó una concienciación hacia las energías alternativas que se vio reflejada en asociaciones y plataformas. Sin embargo, solo el 8% de la energía que se genera en el Archipiélago proviene de fuentes renovables.

Algo que el Gobierno de Canarias confía en que cambie con la puesta en marcha de los parques inscritos en el cupo eólico, que reparte 450 Megavatios (MW) de nueva generación en el Archipiélago y que viene a poner fin a los años de inactividad y conflictos judiciales iniciados con el concurso celebrado en 2007.

Según las previsiones del Ejecutivo regional, la penetración renovable en el mercado de la electricidad de las islas pasará al 21% a finales de 2018, cuando deben estar en funcionamiento los referidos parques eólicos. Unos cálculos que pueden verse alterados por las negociaciones de los promotores y los dueños del suelo donde se implantarán los generadores, las servidumbres aeronáuticas y la cantidad de puntos de enganche a la red que encuentren las instalaciones.

Otra apuesta para extender las energías limpias en Gran Canaria parte del Cabildo y la puesta en marcha de la central hidroeléctrica Chira-Soria.

Sin embargo, el presidente de la Asociación Eólica de Canarias (Aeolican), Rafael Martell, asegura que los ciudadanos tienen margen de actuación para darle un impulso a las renovables, aunque añade que la falta de información hace que se vean limitados a la hora de dar el paso. Martell imapartirá este jueves una conferencia sobre Canarias, las renovables, el coche eléctrico y tu, que se celebrará este jueves a las 19.30 horas en la Real Sociedad Económica de Amigos del País, ubicada en el barrio de Vegueta de Las Palmas de Gran Canaria.

Se trata de una charla dirigida al ciudadano de a pie para a dar conocer las fórmulas que pueden adoptar las personas para aportar su grano de arena en la conversión del sistema eléctrico. “Se trata de informar a la gente y sobretodo ilusionarla, porque podemos ser parte de lo que está sucediendo y no solo esperar a que venga una empresa y monte unos molinos en Arinaga”, apostilla.

Entre el margen de maniobra, sugiere las siguientes iniciativas para que los canarios se “empoderen” energéticamente.

Coche eléctrico:

Para Martell, hacerse con un coche eléctrico supone una “muy buena forma de participar en este cambio”. Sostiene que hacerse con uno de estos vehículos resulta más “más barato” que comprar uno de la misma calidad, pero que use carburante. “Si me comparas un coche eléctrico de BMV, Tesla o de una marca cara, con el coche más barato de Nissan, que es el Micra, obviamente es muy caro. Pero a igual tamaño, prestaciones, segmento... el coche eléctrico ya está muy a la par con uno de gasolina”, asevera.

Al respecto, añade que el coche eléctrico resulta más barato de mantener. Como inconveniente principal sitúa su autonomía. Sin embargo, añade que ese inconveniente no se cumple en Canarias, donde las distancias son más cortas. En este punto indica que “yo tengo un coche eléctrico y no uso los puntos de recarga , porque no hay, pero si los hubiera también recargaría en mi casa por la noche. Mi coche tiene 150 kilómetros de autonomía”. A medida que las renovables penetren en el sistema eléctrico canario, más renovables serán estos vehículos, puntualiza.

Cambiar de comercializadora:

Existen comercializadoras que ofrecen abastecer a las viviendas de energía que provenga únicamente de fuentes renovables. Sin embargo, éstas no llegan a conformar el 1% en Canarias, donde el mercado está liderado por Endesa. “No sabemos que nos podemos cambiar de compañía eléctrica, pero sí lo hacemos en el caso de las telecomunicaciones”, sostiene el presidente de Aeolican, quien reconoce la desconfianza que genera el sector entre los canarios.

Participar en cooperativas:

Una persona puede formar parte de una cooperativa que invierta en renovables mediante la instalación de parques eólicos o fotovoltaicos. Aunque de momento no existe ninguna entidad parecida que opere en las islas, Martell explica que un canario puede participar en una cooperativa que opere en la Península Ibérica y vierte energía limpia en el sistema energético. “Hay cooperativas en las que puedes participar con 100 euros”, señala. De esta forma, explica, se obtiene un beneficio, porque “la energía que produzca ese proyecto, en el futuro la vas a aprovechar tu, porque la propia cooperativa la puede vender a terceros o te la puede vender a ti mismo a precio de saldo”.

Instalar placas solares y baterías en casa:

Las renovables más sencillas de instalar sobre los tejados de viviendas unipersonales son placas solares que sirvan para calentar el agua. Una iniciativa que, según explica Martell, no requiere de permisos ni baterías. Un paso más sería el que dichas placas fueran fotovoltaicas y su función fuera la de abastecer todo el domicilio, con lo que se tendrían que añadir baterías. Este caso es más complejo, ya que hay que afrontar una serie de autorizaciones que se tornan más estrictas en caso de que la vivienda no consuma toda la energía generada y ésta termine vertiéndose a la red.