La Policía dispersa a la población tras decretarse el toque de queda en el país

TÚNEZ, 8 (Reuters/EP)

La Policía ha vuelto a dispersar este domingo, por cuarto día consecutivo, a la población tunecina que se encontraba en el centro de la capital para pedir la salida del actual Gobierno a pesar del toque de queda nocturno impuesto ayer por las autoridades.

Los manifestantes, que aprovecharon para silbar a los agentes de policía --ataviados completamente de negro-- que vigilaban la protesta, clamaban para pedir el final del actual Gobierno en funciones, y en particular el cese del primer ministro Beji Caid Sebsi.

Finalmente, la Policía comenzó a dispersar la concentración con el uso de gases lacrimógenos, a la altura de la avenida Burguiba.

“La reacción de la Policía es demasiado extrema contra la población. Es verdad que hay criminales entre los manifestantes, pero la reacción es demasiado cruel. Es la vuelta a los días de Ben Ali”, ha indicado un manifestante que dice llamarse Chaqib.

Estas protestas siguen teniendo lugar a pesar de medidas conciliatorias como la adoptada ayer por el Gobierno en funciones, que cesó al ex ministro del Interior, Farhat Rajhi, de su puesto como director del comité de reconciliación, tras afirmar que los simpatizantes de Ben Alí podrían dar un golpe de estado si los partidos islamistas se hacen con la victoria en las elecciones previstas para el próximo mes de julio y tras las que se redactará una nueva Constitución.

Los jóvenes manifestantes han dicho que las declaraciones de Rajhi han hecho que disminuya su confianza en el Gobierno interino y que creen que algunos miembros del antiguo régimen podrían estar actuando entre bastidores con el fin de hacer descarrilar el proceso democratizador.

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