“Bailar Los Enanos es como practicar un deporte extremo”
“Bailar Los Enanos es similar a practicar un deporte extremo que te produce un subidón de adrenalina; las últimas funciones las baila el público porque tú ya no tienes fuerzas”. Lo asegura Juan de la Barreda, licenciado en Educación Física y aficionado a los deportes de riesgo, que el pasado jueves danzó por primera vez en el mágico número lustral. Él, como Airán Hernández, cuando llegó a La Alameda tenía el cuerpo lleno de llagas y fuertes dolores musculares. “La noche es dura, larga, se hace un esfuerzo físico importante, la sobrecarga muscular es bastante pronunciada, y hay mucho dolor muscular, pero tienes que resistir”, ha manifestado a LA PALMA AHORA. “El traumatismo cutáneo por el rozamiento es muy doloroso y los zapatos te producen llagas en los pies; también sientes abrasión y calor por todo lo que llevas encima; el cuerpo sufre”, afirma. “Soy deportista y entrenador personal, aunque no he hecho la Transvulcania, pero los compañeros que sí han participado me han comentado que es más dura la noche del baile de Los Enanos; a nivel físico se produce una sobrecarga muscular porque vamos saltando de un lado para otro; se sufre de una manera diferente y son esfuerzos totalmente distintos”, explica. “El baile de Los Enanos es de una intensidad muy elevada, aunque de corta duración, sobre todo en el periodo de la polca, pero de mucha dureza; el enano salta y baila y ese gesto sobrecarga mucho la musculatura, son esfuerzos que se denominan a nivel deportivo anaeróbicos: mucha intensidad y corta duración”, precisa.
La sensación de bailar Los Enanos es “es similar a practicar un deporte extremo que te genera adrenalina, te da un subidón enorme igual que cuando haces puenting o barranquismo”. Pero hay una diferencia importante. “Lo haces para todo el pueblo palmero, te reconforta mucho más que lanzarte de un barranco, aquí comparto esa sensación con mis familiares, mis amigos y con los que vienen de fuera a vernos”, subraya Juan de la Barreda, quien reconoce que “las últimas funciones cuando ya estás agotado las baila la gente, te da la fuerza; te ayuda con los gritos de ánimo; eso te produce un subidón que te hace llegar hasta La Alameda y hasta más allá, porque si hay que ir hasta Puntallana se llega hasta Puntallana o hasta a Los Sauces, pero llegamos seguro”, comenta entre risas, pero con absoluto convencimiento.
“La gente te ayuda a soportar el dolor”
Airán Hernández bailó Los Enanos en esta Bajada por segunda vez. Es también deportista, pero “normalito”, dice, no quiere compararse con Juan de la Barreda, que igual se lanza de un barranco como de un avión, o da la vuelta a la Isla solo en una canoa. “Yo practico atletismo y baloncesto”, señala con humildad. “En la Transvulcania, si te cansas te paras y te vas a tu casa, pero aquí tienes que aguantar por ti, por la gente y por los compañeros, hay que llegar a La Alameda cueste lo que cueste, porque como dice nuestro director artístico, Alonso, somos un equipo, hay que estar ahí al pie del cañón hasta llegar a arriba”. “Es la segunda vez que bailo, y me pasó igual: terminé con rozaduras, calambres y dolores, pero aguantas, tiras para arriba quemándote los pies, y cuando empiezas a bailar y ves la gente te olvidas de todo”. “La gente te ayuda a soportar el dolor, aunque cuando paras, te vuelve a doler, vuelves a la realidad, pero cuando te pones el gorro ahí sí que te olvidas absolutamente de todo”. “Cuando estás parado te duele, te dan calambres y piensas que no vas a llegar, por eso quieres bailar para olvidarte viendo la cara de la gente, sobre todo de los niños y las personas mayores”, indica Airán, quien, según Alonso Lugo, es “uno de los enanos más pijos, porque es coqueto, le gusta vestir bien, y toda esa elegancia y personalidad la transmite”. A pesar del sufrimiento “intentas disfrutar al máximo porque sabes que luego han de pasar otros cinco años para bailar si tienes la suerte de que te elijan; gozas como si fuera la última vez”, concluye.
“El sábado estarán al cien por cien”
Alonso Lugo, director artístico del emblemático y querido número quinquenal, admite que cuando comprueba el estado en el que llegan a La Alameda sus ‘superhombres’, “siento preocupación y hasta pena, pero, a la vez, me invade un orgullo tremendo; ellos, por los efectos de la adrenalina, no saben que tienen el cuerpo lleno de llagas; lo dan todo”. Lugo se centra estos días en recuperar a los danzantes para las funciones de este sábado, 18 de julio. “Es la primera vez que vamos a bailar con solo un semana de descanso, siempre han sido 15 días, por eso me he preocupado en buscar los mejores profesionales para que los recupere rápidamente, y estarán al cien por cien”, sostiene sin ningún género de duda.
En las actuaciones del próximo sábado, avanzó Lugo, Los Enanos tendrán “un detalle emotivo y sencillo” con la joven asesinada el pasado viernes. “Es la primera vez que harán este gesto, y lo harán por Laura, por su familia y en apoyo a la lucha contra la violencia de género”.
