El Príncipe agradece a las tropas en Líbano su contribución a la paz

El Príncipe de Asturias expresó este viernes su “profundo reconocimiento” a las tropas españolas destacadas en el sur del Líbano por la “enorme relevancia” de su tarea para consolidar la paz y preservar la seguridad en esta delicada zona de Oriente Medio.

En una visita que no fue anunciada previamente por razones de seguridad, Don Felipe viajó acompañado del Jefe de Estado Mayor de la Defensa, general José Julio Rodríguez, hasta la base Miguel de Cervantes, cerca de Marjayún, donde un millar de militares españoles vela por la estabilidad de esta zona fronteriza con Israel, en el marco de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en el Líbano (FINUL).

El heredero de la Corona española, que visitó el pasado junio a las tropas españolas destacadas en Afganistán y Kirguizistán, deseaba haber llevado a cabo este primer viaje al Líbano el pasado 30 de enero, con ocasión de su 40 cumpleaños, pero en aquella ocasión no fue posible debido a las adversas condiciones climatológicas.

Hoy, en un día caluroso y soleado, el Príncipe llegó al aeropuerto de Beirut en un avión de la Fuerza Aérea Española y se desplazó desde allí en helicóptero hasta la base Miguel de Cervantes, en Blat, sede de la Brigada Multinacional del Sector Este, donde fue recibido por el jefe de esta fuerza, Juan Carlos Medina, y el comandante de FINUL, el italiano Claudio Graziano.

Tras la interpretación del himno nacional y los habituales honores militares, Don Felipe pasó revista a las tropas, saludó a los oficiales y presenció un desfile en la plaza central de la base, presidida por un monumento en recuerdo de los militares que han perdido la vida en el desempeño de su misión, ante el que depositó una corona de flores con los colores de la bandera española.

En los dos años transcurridos desde que España envió sus primeros soldados al Líbano, han sido siete los militares del Ejército español fallecidos en este país, el último de ellos un colombiano que murió, hace cinco meses al volcar el vehículo blindado BMR en el que se desplazaba.

Un año antes, en junio de 2007, otros seis cascos azules murieron en la ciudad chií de Jiam y se convirtieron en las primeras víctimas de las Fuerzas Armadas españolas de esta misión internacional, que mantiene desplegados a casi 12.700 soldados de 29 nacionalidades.

Don Felipe y la Princesa de Asturias presidieron entonces el funeral de Estado oficiado por estos seis soldados, tres de ellos colombianos, que fallecieron al estallar un coche-bomba al paso de su vehículo blindado.

Tras recorrer las instalaciones de la base y fotografiarse con militares del contingente, el Príncipe firmó en el Libro de Honor y tomó la palabra para agradecer a las tropas su sacrificio y “generosidad sin límites” en el cumplimiento de unas misiones que son muy importantes para España y “enormemente delicadas”, aunque ahora se viva una “relativa tranquilidad” en esta zona fronteriza.

Después de rendir homenaje a los siete militares fallecidos, trasladó asimismo un mensaje de “afecto y reconocimiento” de parte del Rey y concluyó así su alocución: “España está orgullosa de vosotros”.

Durante su visita a la base Miguel de Cervantes, Don Felipe se interesó por conocer detalles sobre las condiciones en que el contingente desarrolla sus tareas, en el marco de la operación Libre Hidalgo VI, que incluye no sólo patrullas -3.650 en los últimos tres meses-, sino también labores de control, limpieza de zonas minadas, asistencia médica y trabajos de reconstrucción.

Desde el pasado agosto, el contingente español está formado mayoritariamente por la Brigada de Caballería de Castillejos II, que aporta 727 efectivos a la misión, y la Agrupación de Apoyo Logístico 41, con 124 soldados, ambas con base en Zaragoza, mientras que el resto proviene de unidades de las Fuerzas Armadas y la Guardia Civil y del Ejército de El Salvador, que participa con 52 militares.

El Príncipe puso fin a su visita sorpresa tras compartir un café con los militares de este contingente, que trabaja para garantizar la paz y la seguridad entre el Río Litani y la llamada Línea Azul en cumplimiento de la resolución 1.701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que puso fin al conflicto entre Israel y al Líbano el 14 de agosto de 2006.

Etiquetas
stats